Hablemos de psicoendocrinología

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Por: Karina Monsalve

El objetivo primordial en el estudio de la psicología clínica es el cerebro, como generador de conducta, de cognición o de emoción, pero no hay que olvidar que detrás de esto siempre habrá un mecanismo fisiológico-neuronal. La psicoendocrinología es una disciplina que estudia el sistema endocrino como sustrato biológico del comportamiento humano y de los procesos cognitivos. Estudia la influencia de las hormonas sobre las conductas, así como los efectos de estos sobre la secreción y el funcionamiento hormonal.

La psicoendocrinología busca la comprensión del papel de las hormonas como agentes de la supervivencia, del cambio evolutivo y de la adaptación individual a las demandas de la existencia.

Por lo general se asocia el comportamiento psicológico de los individuos con el sistema nervioso central, dejando en segundo lugar al sistema endocrino; sin embargo este último al ser el responsable directo de la regulación química del organismo a través de las glándulas y hormonas, tiene un papel muy significativo en el desempeño psicológico de cada individuo.

Las hormonas están relacionadas con los aspectos psicológicos básicamente por dos razones: en primer lugar éstas organizan el sistema nervioso y los tejidos corporales en ciertas etapas del desarrollo. Y en segundo lugar las hormonas activan conductas. Afectan, por ejemplo, la actividad o la somnolencia, la excitabilidad, la conducta sexual, la capacidad para concentrarse, la agresividad, las reacciones de estrés, la reactividad emocional, la capacidad de aprender e incluso la capacidad para resistir la enfermedad. Los cambios radicales en algunas hormonas pueden estar relacionados y contribuir a desórdenes psicológicos severos como los trastornos depresivos.  

La explicación de las relaciones funcionales entre conducta, sistema nervioso y sistema endocrino y ambiente, aumenta la comprensión del papel de las hormonas como agentes de la supervivencia, del cambio evolutivo y de la adaptación individual del individuo a las demandas del exterior. 


Las hormonas están relacionadas con los aspectos psicológicos básicamente por dos razones: en primer lugar éstas organizan el sistema nervioso y los tejidos corporales en ciertas etapas del desarrollo. Y en segundo lugar las hormonas activan conductas

Karina Monsalve

Algunas de las glándulas cuyos efectos están más estrechamente relacionados con la manera en que nos conducimos son:

La glándula Tiroides. Produce la tiroxina. Una tiroides sobreactivada puede producir una gran variedad de síntomas: sobreexcitabilidad, insomnio, reducción del lapso de atención, fatiga, agitación, toma de decisiones impulsivas, al igual que la disminución de concentración y dificultad de enfocarse en una tarea. Cuando los niveles de la hormona tiroides se alteran podemos ver que las personas presentan cambios repentinos en el peso, disminución o aumento en la frecuencia cardíaca, variación en la conducta que puede llegar a generar miedo a lo que lo rodea. 

La glándula pineal. Existe una hipótesis de que las personas que sufren del desorden afectivo estacional (es decir, las personas que se deprimen durante los oscuros meses invernales) pueden estar generando demasiada melatonina liberada por la glándula pineal en respuesta a la iluminación reducida durante esta estación.

El páncreas. Controla el nivel de azúcar en la sangre por la secreción de dos hormonas reguladoras: la insulina y el glucagón. Cuando existe un déficit de insulina, como en la diabetes, se elevan los niveles de glucemia, lo cual produce síntomas como mucha sed, orina en exceso, pérdida de peso, fatiga y cansancio.   

La hipófisis o glándula pituitaria. Produce distintas hormonas, una de ellas es la oxitocina, generada en el alumbramiento, las contracciones del útero y que las glándulas mamarias que comienzan a producir leche. También genera la hormona del crecimiento. Entre los trastornos derivados de una producción excesiva de hormonas hipofisarias se incluyen: acromegalia o gigantismo, disfunción eréctil, esterilidad, enfermedad de cushing, entre otras.

Las hormonas del sistema endocrino ayudan a controlar el estado de ánimo, el ciclo del sueño, el crecimiento y desarrollo del individuo. ¿Cuáles serían los trastornos hormonales que inciden en el comportamiento conductual y emocional de los individuos?

  • Adrenalina. Es conocida como la hormona del estrés. Su déficit provocaría depresión, baja motivación y apatía.
  • Endorfinas. La segregamos cuando hacemos ejercicio o al reírnos. En grandes niveles puede provocar sensación de bienestar y estados de euforia.
  • Cortisol. En niveles elevados puede producir ansiedad, taquicardia, nerviosismo. En niveles bajos produce cansancio, fatiga, desánimo.
  • Serotonina. Influye en la aparición del hambre o su ausencia. Su bajo nivel está asociado con depresión.
  • Dopamina. Influye en el disfrute de emociones fuertes.
  • Oxitocina. Niveles elevados favorecen las relaciones sociales y los bajos se asocian a sentimientos de tristeza.
  • Melatonina. Relacionada con los ciclos de sueño y vigilia. Su déficit puede provocar insomnio. 

Para poder garantizar una buena salud y un estado de ánimo adecuado es importante que estas hormonas se encuentren en equilibrio y no se produzcan desajustes. Si usted nota cualquier alteración en su estado de ánimo sin causa aparente, no dude en visitar al especialista y realizarse una serie de evaluación endocrina que pudieran explicar el cambio repentino. 


KARINA MONSALVE | TW @karinakarinammq IG @psic.ka.monsalve

Psicóloga clínica del Centro Médico Docente La Trinidad.