San Carlos de Zulia.- Las autoridades del municipio Francisco Javier Pulgar, en el estado Zulia, declararon este lunes, 9 de noviembre, alerta roja ante un eventual desbordamiento del río Chama en las cercanías de Pueblo Nuevo El Chivo, capital de ese municipio en el Sur del Lago. La amenaza podría dejar bajo agua miles de hectáreas y centenares de familias afectadas.
La situación mantiene en suspenso desde el pasado 6 de noviembre a los productores de plátano, vecinos y funcionarios de la Alcaldía de Pulgar, quienes ante la creciente del afluente por las lluvias registradas en el eje andino, refieren que la caja de agua rebasa su capacidad y los sedimentos arrastrados carcomen el muro de contención situado en la curva de arena de un punto crítico del sector El Boche.
El alcalde Luis Urbina, en un audio enviado por su departamento de prensa, señaló que el río está a un metro y medio de ceder a la margen derecha. Este domingo informó que a la zona arribó una maquinaria tipo excavador de la empresa Pedro Camejo para iniciar las labores de reforzamiento. “Esta situación podría anegar a El Chivo”, dijo la autoridad civil a medios locales.
Este lunes Ernesto Nava, director de Ambiente de la Alcaldía, manifiestó que de no tener suerte en el reforzamiento, al menos ocho sectores podrían quedar sumergidos en un caudal fuera de control. Vía telefónica, adelantó proyecciones y aseveró que la anegación llegaría a comunidades como El Boche, El Tocuyo, El Ciénago, Materita, La Motosa, Pipa Roja, Puerto Santa Rosa y El Atravesado.
También acotó que el comportamiento del río Chama es impredecible. “El agua que drena a Caño Viga y pasa detrás del pueblo de El Chivo representa otra amenaza para las zonas residenciales, tal como ocurrió en el año 2010”, recuerdó Nava, quien aún no sabe hacia qué zonas podría afectar el afluente, en caso de un evento no esperado. En la población, las autoridades pidieron a la ciudadanía estar vigilantes y tomar previsiones.
El río Chama, que atraviesa tres de las cuatro parroquias de Francisco Javier Pulgar, lleva consigo sedimentos que arrastra desde su naciente en el sistema montañoso de Los Andes, lo que colapsa su capacidad. Además, se ve vulnerado por un “sistema meandral, que es una cantidad de meandros o curvas que tiene el río”, que lo hace difícil de controlar o predecir, según advierte el vocero gubernamental.
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Un operativo con pocas herramientas
En Francisco Javier Pulgar la Alcaldía no cuenta con excavadores brazo largo, por lo que debieron articular con la empresa estatal Pedro Camejo, para movilizar un “jumbo”, como así denominan la máquina. En el lugar prevén colocar ocho escolleras rudimentarias o espigones.
Estas escolleras, según Nava, serán elaboradas con rolas o troncos vegetales, que fueron cortados en el mismo lugar. “Son de otro material porque no hay de cocoteros, ya se agotaron”, expresa. Dice además que pidieron insumos a los productores de plátanos, afectados por el invierno y la falta de gasolina. Entre autoridades y gremios productivos ubican combustible, un lowboy para trasladar maquinaria pesada, rollos de alambre de púas, guantes, mecates y palmas.
La operativa hidráulica del espigón permeable, por falta de tiempo y logística, deberán ser ejecutarla con métodos rudimentarios. “Estamos apoyando en lo que se pueda porque no queremos perder más sembradíos”, dijo vía telefónica a El Pitazo, Edgar Boscán, presidente de la red de productores libres y asociados de Francisco Javier Pulgar.
Cada hora que pasa en Francisco Javier Pulgar es de suma expectativa porque no saben si al despertar una fría agua podría entrar a sus hogares, como ocurrió en la parroquia Urribarrí del municipio Colón, cuyo río Chama, a la margen izquierda, ya drenó por una abertura que mantiene cultivos y zonas residenciales bajo agua. Aún las autoridades locales no emiten un reporte definitivo de la afectación.
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