Acarigua.- Cinco días detenidos cumplían este miércoles, 28 de octubre, nueve choferes de la empresa estatal Almacenes y Transporte Cerealeros (ATC), con sede en Acarigua, Portuguesa, por el supuesto hurto y tráfico de materiales estratégicos.
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Los trabajadores, por órdenes de la gerencia de la compañía, transportaban un lote de tubos de Pdvsa al oriente del país, y en un punto de control de la Guardia Nacional (GN), en la población de El Tigre, estado Anzoátegui, fueron aprehendidos, el pasado viernes 23. Las autoridades expresaron que las guías del traslado de la carga estaban falsificadas.
Por este hecho, en total hay 26 trabajadores detenidos, nueve residen en las ciudades de Acarigua-Araure, en Portuguesa. Sus familias se han mantenido por tres días a las puertas de la empresa de transporte esperando una respuesta de los representantes de ATC.
Denuncian que no les aportan información sobre la condición actual de los choferes, ni física ni judicial.»Aquí no nos dicen nada, sólo que no tienen información de ellos. No sabemos si la empresa les puso un abogado para que los asistiera. Nosotros, ni siquiera podemos viajar hasta donde están para conocer la situación por la pandemia», expresó Oriana Sánchez, esposa de uno de los detenidos.
Sánchez recalcó que los choferes solo hacían su trabajo como transportista. «No son ninguna banda organizada como los expusieron ante la prensa. Ellos solo son trabajadores que cumplían órdenes de los gerentes de esta empresa, y lo tenían que hacer, porque muchas veces, los amanezan con despedirlos si no agarran las gandolas y hacen los viajes. Nuestros familiares, esposos, solo trabajaban para llevar comida a sus hijos», comentó.
Durante los cinco días, los familiares no han tenido comunicación con los trabajadores involucrados en el hecho. «Sólo se pudieron comunicar con sus familias una sola vez, antes que les quitaran los teléfonos y lo único que dijeron es que estaban detenidos en El Tigre, porque las guías eran falsas. No sabemos si comen, si los están tratando bien, si ya los presentaron ante tribunales. No sabemos nada de ellos», dijo Rosanny Parra, esposa de otro de los choferes aprehendidos.
Los familiares resaltaron que en el grupo de trabajadores detenidos hay un septuagenario y algunos presentan enfermedades patológicas, cómo hipertensión y gastritis, por lo que les preocupa su condición de salud.
Algunos trabajadores tenían más de 15 años prestándole servicios a la empresa y otros apenas seis meses.
«No es justo que ellos estén pagando por algo por lo que no tienen responsabilidad. Las autoridades deben investigar este hecho y se darán cuenta que esos trabajadores solo estaban haciendo lo que se les ordenó, sin conocer que estaban incurriendo en un hecho ilícito, mientras los verdaderos responsables, el Coronel Calzada y el señor Pirela, están muy tranquilos, evadiendo sud culpas», expresó Sánchez.
