Ciudad Bolívar.- Habitantes del sector Hipódromo Viejo, en la parroquia Catedral de Ciudad Bolívar, estado Bolívar, temen por las consecuencias de la crecida del río Orinoco para este 2021, que pueden ser similares a las inundaciones de 2018.
“Somos más de 170 familias que estamos en zona de riesgo ante la crecida del río Orinoco. En 2018 fue grave, porque además de las enfermedades que hubo en ese momento, también murieron dos personas: un niño y un anciano”, explicó a El Pitazo la vecina del sector, Tatiana Silva.
Entre las enfermedades que temen, además del COVID-19, están el paludismo, dengue, hepatitis, como ha ocurrido en otras ocasiones. Esto debido a que tampoco tienen acceso al servicio de agua potable por tubería, por lo que deben improvisar tanques de agua, por lo que están en mayor exposición a estos padecimientos.
Las autoridades regionales alertaron el crecimiento de los ríos Orinoco y Caroní, pues están a niveles superiores a 2018, cuando se registró la crecida histórica en Ciudad Bolívar. Para este 2 de julio, el Orinoco está en 14.78 metros sobre el nivel del mar.
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Recolección de basura
En el sector no cuentan con el servicio de recolección de basura, por lo que han tenido que utilizar espacios como vertederos de basura, lo que ha llevado al desbordamiento y colapso de cloacas.
“Estos botes improvisados continúan haciendo estragos, porque también nos expone a las enfermedades. Además que esto se complica con las inundaciones que están previstas. Las autoridades no han venido a hacer una evaluación de cómo está”, denunció Silva.
Las 170 familias de Hipódromo Viejo esperan que en los próximos días se acerquen autoridades regionales y de Protección Civil a evaluar las zonas de riesgo para tomar correctivos y evitar daños graves más adelante.
“Los vecinos y los jóvenes defensores de los Derechos Humanos hacemos un llamado a las autoridades locales a proteger los derechos a buena calidad de vida, seguridad social y asistencia social a esta comunidad que tiene diversos padecimientos y fue abandonada”, manifestó el defensor de derechos humanos, Hernán Bethelmy.