Ciudad Guayana.- Un niño de 11 años murió por inmersión al quedar atrapado en una potente corriente del río Caroní, cerca del barrio Francisca Duarte de San Félix, estado Bolívar. La información la confirmó a El Pitazo un familiar de la víctima este lunes, 23 de agosto.
Lixay Loreto, tía del niño, detalló que el trágico incidente ocurrió el sábado, 21 de agosto, cerca de la 1:00 pm. La víctima estaba jugando fútbol con su hermano de seis años y un vecino de la misma edad cuando, sin permiso de sus padres, decidieron ir a bañarse al río.
El reporte de Protección Civil reveló que la zona donde estaban los infantes se llama “playita de Macagua”. El caudal del Caroní estaba muy fuerte y hondo, así que los dos niños de seis años salieron, pero él se quedó en el agua, relató su tía vía telefónica. Sabía nadar y no era la primera vez que iba a ese lugar.
De pronto comenzó a pedir auxilio porque el caudal se lo estaba llevando. Su hermano menor y el vecino, como pudieron, le lanzaron una rama para que se sujetara. “El río estaba muy crecido, la rama se rompió y la corriente se lo llevó”, dijo. Los otros dos infantes corrieron a contar lo sucedido a los padres, pues no había ningún adulto en el sitio.
El afluente arrastró al niño a unos 800 metros, lo sumergió y estuvo desaparecido por casi 24 horas, hasta la mañana del domingo, 22 de agosto, cuando funcionarios del Cuerpo de Bomberos de Caroní hallaron el cuerpo atascado entre una piedra y una rama.
Segundo caso en menos de un mes
Este es el segundo caso de un niño fallecido por inmersión en el río Caroní en menos de un mes. Hace 17 días otro infante de 11 años murió ahogado cuando se lanzó al afluente a la altura del sector Campo Rojo, en pleno embalse de la Central Hidroeléctrica Antonio José de Sucre, conocida como Macagua.
Los parientes contaron que un remolino lo arrastró hasta la densa vegetación bajo el agua, de donde no pudo salir rápidamente. El cadáver fue hallado horas después.
En Bolívar las autoridades decretaron la alerta roja en el río Caroní y la amarilla en el Orinoco, debido al aumento en el nivel de los dos afluentes. Más de 400 viviendas se inundaron y muchas familias fueron trasladadas a refugios temporales. El pronóstico de Protección Civil es que la crecida sea mayor.
