La población del Delta, comunidades asentadas en la zona fluvial del Orinoco, permanece incomunicada ante la falta de transporte por la escasez de gasolina. Desde el pasado 1° de junio, el nuevo cronograma de suministro no favorece a las dos estaciones de servicios fluviales y fronterizas ubicadas en la parroquia Aniceto Lugo, que abastecen las embarcaciones particulares y transporte del sector fluvial en el municipio Antonio Díaz.
Al menos 35.000 habitantes del municipio Antonio Díaz se encuentran sin abastecimiento; el hecho afecta el funcionamiento de la ambulancia para el traslado de los pacientes desde los hospitales de Curiapo, del Centro de Salud Hermana Isabel López y del hospital Luis Gómez, todos ubicados en el corazón de la selva del Delta.
De acuerdo con el testimonio de los moradores, la falta de combustible en las comunidades también afecta el servicio de la energía eléctrica: “Las plantas eléctricas funcionan con gasoil o gasolina; ya perdimos la cuenta desde cuándo estamos en la oscuridad y sin trasporte”, sostuvo una persona que prefirió reservar su identidad por temor a represalias.
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El cacique de la comunidad Nabasanuka, Enrique Moraleda señala a El Pitazo que las ambulancias de los hospitales desaparecieron por falta de gasolina y el deterioro de los motores fuera de borda: “No hay posibilidad de trasladar las emergencias, los waraos mueren por el camino antes de llegar a Tucupita”, dijo.
De igual forma, 5.000 pescadores son afectados seriamente por ausencia total de la gasolina, las pescas de pequeños y medianos productores desaparecieron. Los pescadores mudaron sus redes e implementos de trabajos ante la escasez total de combustible. Muchos decidieron cruzar las fronteras de Trinidad y Tobago en busca de mejores horizontes.
El Gobierno regional, encabezado por Lizeta Hernández, ha señalado en diversas ocasiones que tanto los productores como el transporte terrestre y los vehículos particulares tienen la gasolina garantizada. Sin embargo, se mantiene en silencio sobre el abastecimiento a las comunidades de la zona fluvial. Donde sus habitantes utilizan canoas impulsadas por las fuerzas del viento y remo ante la falta total de combustible en la zona.
