Caracas.- Este martes 7 de enero, más de 100 organizaciones sindicales del gremio educativo convocaron a todos los sectores de la sociedad civil a participar en una marcha a propósito del Día del Maestro, el próximo miércoles 15 de enero. Con esa movilización, Griselda Sánchez, representante del Sindicato Venezolano de Maestros, espera que se dé el primer paso hacia la huelga nacional.
La primera semana de 2020 en Venezuela está marcada por una subida de 20% sobre la tasa del dólar paralelo; el aumento de los precios de los productos de la canasta básica; el uso del petro –moneda electrónica creada por la gestión de Nicolás Maduro-, luego de la asignación de un bono al sector público y la toma de la Asamblea Nacional (AN) por parte del chavismo acompañado por opositores disidentes involucrados en casos de corrupción.
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En este escenario, los docentes venezolanos se preparan para la primera protesta del año, luego de tres meses exigiendo la dolarización de los salarios, la revisión del contrato colectivo, la reestructuración de todos los planteles, la reivindicación de la profesión y la destitución del ministro Aristóbulo Istúriz.
Camino a la huelga nacional
De acuerdo con Sánchez, entre enero y febrero los trabajadores del sector público se organizarán para ejecutar una huelga nacional con la que pretenden presionar al Poder Ejecutivo para que renuncien. “El país completo debe pararse hasta que ellos (el Gobierno) pongan sus cargos a la orden o nos den respuestas concretas a nuestras necesidades”, explicó.
Entre septiembre y diciembre de 2019, docentes venezolanos activaron tres paros nacionales en las escuelas y liceos de 24, 48 y 72 horas. Este año esperan que en la protesta participen todos los gremios.
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Como base de las manifestaciones, varios docentes mencionaron los artículos 83 y 91 que establecen la salud y un salario que cubra todas las necesidades como derechos de la ciudadanía y deberes del Estado y el 104 que fija que la educación estará a cargo de profesionales, con lo que denuncian el plan de formación maestros exprés de la Zona Educativa.
El diálogo ahora es con la ciudadanía
Aunque en 2019 no se lograron ninguno de los cambios que esperaban los docentes, José Marcano, también sindicalista, aseguró que el sector se organizó y unificó para exigir sus derechos. “Logramos la dignidad para seguir en la lucha”, dijo.
Tampoco hubo respuestas del ministro. Ya en septiembre pasado, Robert Franco, sindicalista y representante del estado Sucre, había denunciado que durante el período escolar 2018-2019, Istúriz canceló 32 convocatorias a reuniones e ignoró 29 comunicados conciliatorios; por lo que el gremio decidió no dialogar con las autoridades sino planificar con la ciudadanía.
Sánchez expresó que las conversaciones que se realicen a espaldas de los sindicatos serán desestimadas. A finales de 2019 varios voceros del sector aseguraron que algunas federaciones insistían en llegar a acuerdos con el ministerio, aun sin la aprobación de los trabajadores.
“El gobierno se sienta a planificar la destrucción de los venezolanos, por eso ya no vamos a dialogar. La línea política que vamos a seguir es la línea de la reivindicación de los trabajadores”, refirió quien es docente y representante sindical desde hace una década.
