Caracas. Desde inicios de 2019 ha aumentado la cantidad de comerciantes que ofrecen granos, café, azúcar, harina, sal, jabón y otros productos en cantidades menores a lo usual.
Armar «bolsitas» desde 200 gramos es una alternativa para que más personas puedan comprar, ya que los montos del kilo de productos son cada vez más elevados.
«En el mercado popular he visto desde hace tiempo bolsas de café, azúcar y harina sin marca que, afortunadamente, cuando las compro son de buena calidad, aunque uno no sabe de dónde son» dijo Katherine Galindez, ama de casa, quien resaltó que los vecinos de la tercera edad que suelen necesitar ayuda son los que más recurren a comprar en estas presentaciones.
LEE TAMBIÉN:
CRIPTOMONEDAS, UNA PROTECCIÓN CONTRA LA DEVALUACIÓN DEL BOLÍVAR
En la avenida Andrés Bello, desde hace 3 meses, una señora que prefirió resguardar su identidad vende café en bolsitas. «Yo inicié este negocio, porque aunque no gano mucho, gano más que sentada en una oficina» aseguró.
Ella compra los granos de café a distribuidores que siembran en el interior del país y explicó que mientra siga esta «crisis económica» se incrementarán las personas que agarren un molino y se pongan en una esquina a vender.
En su puesto hay bolsitas desde 200 gramos hasta un kilo, la gente suele llevarse las más pequeñas y la forma de pago más común es con punto de venta, que se lo presta el kiosko más cercano, aunque acepta bolívares en efectivo, pago móvil y dólares, explicó.
Para combatir la guerra económica
Juana Pérez es la encargada de un local ubicado en la planta baja del Urbanismo Andrés Bello, construido por el Ministerio de Vivienda, en donde venden café, azúcar, harina y granos en bolsitas con el objetivo de «ayudar a la comunidad a combatir la guerra económica» aseguró.
«El bloqueo que tenemos ahorita no nos está ayudando y por eso le damos opciones a la gente, el que no pueda comprar un kilo tiene la oportunidad de comprar menos y así nos ayudamos entre todos» explicó Pérez, quien destacó que la comunidad se ha visto agradecida por esta nueva medida aplicada.
«Yo creo que comprar de bolsita en bolsita es gastar más dinero, porque al final te va a durar poco. Es difícil, pero prefiero hacer el esfuerzo de comprar de a kilo» dijo Judith Jiménez, ama de casa, quien aseguró que cada vez son menos los alimentos que se pueden comprar.
«Antes la cocina y la nevera estaban llenas siempre, ahora todo es contado y lo que compras dura poco porque compras menos» completó.
Jiménez explica que ha recurrido sobre todo a comprar jabón líquido en lugares en donde el comprador lleva el envase, porque eso sí le parece más accesible.
También ha recurrido a comprar aceite empacado en menos de medio litro porque es lo que ha conseguido cuando no tiene ni una gota en la cocina.
De muy mala calidad
«Hemos empezado a comprar en bolsitas porque todo está muy caro, pero lo malo es que a veces es de muy mala calidad lo que uno compra» dijo una ama de casa que prefirió resguardar su identidad, mientras compraba en el Mercado Guaicaipuro.
«La verdad es que a la gente ya no le importa la marca, sólo ven si el jabón hace espuma o no y lo compran en bolsitas» dijo una vendedora de jabón en la Avenida Andrés Bello.
Pagando las consecuencias de las sanciones
Respecto a las recientes sanciones impuestas a Maduro por parte del gobierno de Estados Unidos, los entrevistados también opinaron.
«Yo no sé si las sanciones de Estados Unidos nos afectan, lo que sí sé es que ningún país debe meterse en nuestros problemas» dijo una vendedora de jabón en bolsitas en la Avenida Andrés Bello.
«Yo creo que los venezolanos vamos a terminar pagando las consecuencias de las sanciones pero si contribuyen con la salida de Maduro estoy sumamente de acuerdo» es la opinión de Galíndez.
Muchos venezolanos diariamente se reinventan para llevar comida a sus hogares y también para apoyarse entre sí, porque la crisis impacta a gran parte de la población.
Mientras antes podían llenar la nevera todas las semanas, hoy se debaten entre qué cantidad de alimento comprar para satisfacer lo mínimo.
