Maturín.- La Superintendencia Nacional de Gestión Agroalimentaria (Sunagro) tiene cinco meses sin suministrar harina de trigo a las panaderías del estado Monagas, algo que ha obligado a los empresarios a importarla, pero a un precio que no se acerca a las ganancias que reciben todos los días por la venta de sus productos.
Cada saco de harina de trigo cuesta 43 dólares. La asesora tributaria de Fedecámaras en el estado, Magloris Alcalá, explica que los cambiantes precios de otros insumos como el azúcar, la manteca y la mantequilla también afectan la producción diaria. Por ejemplo, un paquete de 15 kilogramos de manteca tiene un costo de 450.000 bolívares, mientras que un saco de azúcar está por el orden de los 600.000 bolívares.
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“Los inventarios han caído porque hay limitaciones en la importación y ahora el panadero no puede preparar el producto en grandes cantidades. Estamos viendo que ante la falta de asistencia de Sunagro, la situación se le complica al empresario, quien está obligado a ingeniárselas todos los días para sacar a flote a su negocio”, explica Alcalá, quien también es representante de la Cámara Asiática en el estado.
La crisis económica por la que atraviesa Venezuela ha hecho que un 25% de las 200 panaderías que se estima que existen en el estado hayan cerrado sus puertas; son 50 negocios que han quebrado entre 2017 y este año porque no pudieron mantener los costos de producción y pagar la nómina de sus empleados.
Las 150 que quedan operativas se enfrentan, además, a otra realidad: la preparación de pan casero, cuya venta ha repuntado en las comunidades y en el caso de Maturín, a lo largo de la avenida Bolívar. “Estamos hablando de locales pequeños de producción, que están proliferando porque la persona no le paga a un empleado y tampoco paga el alquiler de un local”, detalla.
Para reinventarse y evitar el quiebre, la mayoría de las panaderías han recurrido a vender otro tipo de productos, como frutas y hortalizas, aunque algunas también muestran en sus estantes artículos de aseo personal y de limpieza.
