Caracas.- El economista Asdrúbal Oliveros estimó que si el gobierno de Maduro no puede importar más gasolina, el mercado interno no podrá ser atendido, debido a que la producción nacional de combustible está por el orden de los 25.000 barriles por día y esto no es suficiente: “Para el mes de junio hubo recuperación del consumo de gasolina y estuvo en el orden de los 156.000 barriles por día; mejoró respecto a los niveles de abril y mayo».
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El especialista añadió que antes de la pandemia, el mercado local consumía entre 190.000 y 210.000 barriles de combustible diariamente.
La conferencia virtual del economista Asdrúbal Oliveros se produjo durante su participación en el Foro Prospectiva 2020, semestre II, organizado por el Centro de Estudios Políticos y de Gobierno de la Ucab, el jueves 30 de julio.
En relación con las ganancias del gobierno de Maduro en la venta de gasolina en divisas, el también director de Ecoanalítica explicó: “El gobierno de Maduro no obtiene grandes recursos en dólares con lo que capta de venta de gasolina en el mercado interno. Lo que sí es cierto es que el gobierno pierde menos dinero por concepto al subsidio al precio del combustible”.
En otro orden de ideas, expuso que entre 30 %y 35 % de la economía nacional se maneja “al negro”, situación que baja la presión en cuanto al tema de suministro de dólares y bienes al mercado nacional. “Sin duda, esto lo permite el gobierno porque le favorece, porque este esquema paralelo le da dinamismo a la actividad económica y comercial del país”.
Sobre las variables macroeconómicas para fines de 2020, el economista Oliveros informó que la inflación cerrará en 4.000 % y el Producto Interno Bruto (PIB) caerá en 33 puntos. “En el actual contexto no es posible que el gobierno de Maduro controle la hiperinflación», dijo.
Estimó que con las elecciones a la Asamblea Nacional (AN), convocadas por el oficialismo, el régimen bolivariano pretende armar el andamiaje legal que permita la creación de un nuevo esquema económico.
“El estado dejará de ser actor principal para ser promotor, sin dejar de ser el que controle al país políticamente. Se fomentará una economía más pequeña con privilegio a las importaciones en detrimento de la manufactura, que no podrá reactivarse, pues eso exige demanda de energía. Además, se apoyará en el surgimiento de nuevos actores empresariales que convivirán con el sector privado tradicional”, explicpo
