Caracas.- Ripple, una de las empresas más importantes del mundo de las criptomonedas y una de las monedas digitales más populares después de bitcoin y ethereum (XRP), recibió recientemente una demanda de la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) que puso a la compañía en la cuerda floja y provocó el desplome del precio de su criptomoneda.
En la demanda presentada el pasado 23 de diciembre el regulador acusa a Ripple de vender XRP como una divisa cuando en realidad se trata de un valor sin ninguna licencia para operar en transacciones, según la SEC ilegales, por las que el CEO de la empresa, Brad Garlinghouse, y el cofundador, Chris Larsen, recaudaron 1.300 millones de dólares.
Tras la demanda, el valor de la criptomoneda se ubica por debajo de los 0,20 céntimos de dólar y acumula pérdidas en lo que va de mes de 66%. La empresa, por su parte, niega las acusaciones y asegura que se defenderá de un proceso que de momento no parece favorable para la compañía.
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De acuerdo con el experto José Antonio Bravo, consultado por el diario El Confidencial, el punto central de la demanda gira en torno a determinar si en un modelo centralizado como el de Ripple la criptomoneda opera como divisa con valor independiente o si se trata de un valor que varía dependiendo de la empresa que esté detrás de la transacción, por lo tanto solo sirve para especular y el éxito o fracaso depende de la empresa que lo respalda.
El especialista resalta que a diferencia del bitcoin o ethereum, XRP no se mina sino que es un modelo centralizado en el que la empresa, Ripple, decide cuantas monedas libera y deja que se muevan y aglutina el resto.
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