Londres.- Los duques de Sussex, Enrique y Meghan, han confirmado a la reina Isabel II de Inglaterra que no volverán a trabajar como miembros de la familia real británica, según informó este viernes el palacio de Buckingham en un comunicado.
El príncipe Enrique, nieto de Isabel II, y su mujer habían decidido hace un año apartarse de la monarquía, empezar una nueva vida fuera del Reino Unido y ser financieramente independiente, en lo que entonces se conoció como el «Megxit», pero esta situación estaba pendiente de revisión a principios de 2021.
Con esta confirmación, la jefa de Estado ha decidido retirarle a su nieto -sexto en la línea de sucesión al trono británico- los patrocinios honorarios que ostentaba y que volverán a la soberana, quien los distribuirá a otros miembros de la familia real.
El príncipe Enrique y Meghan Markle estrenan un podcast juntos
La decisión se conoció días después de que los duques, que se casaron en la capilla de San Jorge del castillo de Windsor (oeste de Londres) en 2018, informasen de que serán padres de su segundo hijo. Además, coincide con la hospitalización del duque de Edimburgo, esposo de la reina Isabel II.
En el comunicado divulgado, el palacio agregó que, al confirmar los duques su decisión, la reina les escribió para comunicarles que no es posible continuar con las responsabilidades y deberes que forman parte de la vida al servicio público. «Los nombramientos honorarios militares y los patrocinios reales que ostentaban los duques volverán, por lo tanto, a Su Majestad, antes de ser distribuidos entre miembros trabajadores de la familia real», puntualizó la nota del palacio.
La residencia real admitió que, si bien es una decisión triste, Harry y Meghan son aún «miembros muy queridos de la familia real». Un portavoz de los duques de Sussex declaró que ambos siguen comprometidos con su deber y su servicio al Reino Unido y en todo el mundo, y han ofrecido su apoyo continuado a las organizaciones que han representado, al margen de su rol oficial.
Esta web usa cookies.