EL PODER EN ESTE PAÍS
Por: Rogelio Guevara Cantillo
Venezuela, en otros tiempos potencia energética, se enfrenta nuevamente al problema del combustible, en esta oportunidad con el diésel. Desde mediados de octubre de 2020 el carburante no llega al país por las sanciones impuestas por el expresidente de Estados Unidos Donald Trump. Los inventarios son un misterio, pero según proyecciones de varios analistas se podría sobrevivir hasta marzo o abril de este año. El diésel que se usa en el territorio venezolano es mayoritariamente importado.
La crisis del diésel afectará la logística de la movilización de productos estratégicos como alimentos, el transporte de carga, el transporte público, entre otros. En Caracas y áreas aledañas ya se observan algunas colas para surtir gandolas, buses o camiones que se mueven gracias al diésel. Sí, Caracas, aunque parezca mentira.
Debido a la escasez de diésel, ya hay áreas que comienzan a verse afectadas, como por ejemplo la producción de caña de azúcar. De hecho, la Federación de Asociaciones de Cañicultores de Venezuela (Fesoca) ha denunciado este hecho públicamente. Como es de suponer los precios en supermercados se han incrementado. Por su parte, la Federación Venezolana de Organizaciones Productoras de Arroz (Fevearroz) denunció que solo han avanzado cerca de un 35% de la superficie de siembra estimada en 20.000 hectáreas para el ciclo norte verano 2020-2021 y que la falta de diésel atenta contra la producción nacional de este rubro y muchos más.
El líder agropecuario Aquiles Hopkins, presidente de la Confederación de Asociaciones de Productores Agropecuarios de Venezuela (Fedeagro), ha advertido en innumerables ocasiones desde el año pasado que “la escasez de diésel pone en riesgo la siembra de frijol, arroz y otros en el occidente del país. Los responsables de la distribución del combustible deben dar atención prioritaria a la producción de alimentos. Para mañana ya será tarde, en agricultura el tiempo no perdona”.
La crisis del diésel afectará la logística de la movilización de productos estratégicos como alimentos, el transporte de carga, el transporte público, entre otros
Rogelio Guevara Cantillo
Una opción que se desea negociar es apartar el tema de las sanciones contra Nicolás Maduro en el sector diésel para poder importarlo. Si ya la movilidad se había afectado por el tema COVID-19, con la falta de diésel empeorará. Este combustible también es indispensable para la energía en plantas y la generación de electricidad, sobre todo en las entidades del interior del país.
Muchos actores de poder quieren que Biden y Blinken reviertan esta medida, pero ¿qué ofrecerá Miraflores a cambio? La nueva administración Biden – Harris estaría considerando la posibilidad de restablecer los intercambios de crudo por diésel de Venezuela y aliviar en este ámbito a una maltrecha economía y sociedad, pero el sistema refinador del país se desangra semana a semana y no se contempla una solución estructural al menos por varios años más.
Desde octubre del 2020, el gobierno del entonces presidente Donald Trump prohibió a compañías petroleras tener operaciones con Venezuela, salvo ciertas excepciones que contaban con licencias de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (Ofac). Más de un año antes, en enero del 2019, EE. UU. impuso sanciones a Pdvsa, la empresa estatal petrolera venezolana; sin embargo, los trueques de diésel estaban exentos. Empresas como Repsol, Relliance y Eni participaron en este intercambio con Pdvsa. Un daño considerable que saca a colación Luis Vicente León es que la mayoría de las termoeléctricas se han deteriorado por el azufre del diésel local.
Para experto en energía Oswaldo Felizzola la nueva sanción aplicada por EE. UU., basada en una recompensa de $15.000.000 para quien ofrezca información acerca de quienes ayudan al gobierno de Maduro a mover el crudo, busca determinar cómo se mueven los fondos y quienes colaboran en ese entramado. Cómo paga Venezuela ese crudo a Irán. La parte de logística y movilización de barcos la conocen muy los estadounidenses. El objetivo del convenio de diésel por petróleo es que todo se controle desde Washington D.C. y que la nueva administración Biden no sea agresiva, pero sí consistente y como ejemplo está el nombramiento de Janet Yellen en el Departamento del Tesoro. En materia de acuerdos energéticos, Felizzola considera que la nueva oligarquía del gobierno no logra coexistir pacíficamente con ese grupo de los llamados radicales del oficialismo, algo que era de esperarse debido a los dilemas fundamentales dentro del Psuv. Felizzola considera que es importante observar hasta qué punto dentro del mismo chavismo, pueden negociar entre ellos.
Muchos actores de poder quieren que Biden y Blinken reviertan esta medida, pero ¿qué ofrecerá Miraflores a cambio? La nueva administración Biden – Harris estaría considerando la posibilidad de restablecer los intercambios de crudo por diésel de Venezuela y aliviar en este ámbito a una maltrecha economía y sociedad
Rogelio Guevara Cantillo
En este sentido, adicionalmente converse con el experto petrolero Rafael Quiroz Serrano y comenta que debemos saber y tener claro que el diésel es un subproducto de la refinación de petróleo crudo y es utilizado básicamente por camiones, autobuses y maquinaria agrícolas. “Yo veo la escasez de gasoil como algo muy delicado. Su escasez es mucho más perniciosa que la de la gasolina puesto que esto afecta directamente operaciones del sector agrícola y ganadero, manufactura, distribución y transporte público de pasajeros. Esto tendrá un efecto multiplicador hacia abajo fuerte, y debe encender las alarmas más allá de la gasolina porque junto con la escasez de esta del fueloil, está que se utiliza para plantas industriales y en las centrales térmicas que generan electricidad” explica Quiroz Serrano.
El analista Tomás Socias considera que mejora el suministro de gasolina en el país, pero con mayor escasez del gas y el diésel. “Mejora el suministro en el primer mes del año. Se logra la salida de más buques de gasolina y que entren de tres a ocho de ellos, obviando dar informaciones en todo su trayecto”, opina Socias. De acuerdo con el mapa país que elabora el analista, en el Ejecutivo no se esperan cambios radicales en la economía, solo se instrumenta el nuevo sistema para las transacciones en divisas. Según Socias, el Ejecutivo está “seguro de que este semestre les será ligeramente mejor”. En torno a la pandemia, adelanta que el presidente Maduro afloja en algo las restricciones, pero aprueba el esquema 7+7 para el primer semestre y desecha otros esquemas.
Hace pocos días, la Ofac emitió una nueva licencia, la 30A, en la que autoriza ciertas transacciones necesarias para las operaciones portuarias y aeroportuarias con Venezuela. Esta sería la primera medida que toma la administración Biden referente al tema sanciones, aunque hoy es muy temprano para conocer su impacto futuro. La mayoría deseamos la reactivación del sistema económico de Venezuela, pero sin diésel es una misión borrascosa. El diésel es movimiento y ese movimiento va a ser limitado o cercenado para la economía. Recordemos además que la demanda “real” de diésel o de otros combustibles en el país es Venezuela más Cuba.
ROGELIO GUEVARA CANTILLO | @Rogeliogcmundo
Analista del poder y economía en Latinoamérica.