Es bien sabido que, durante una investigación policial, las autoridades estadounidenses piden información a distintas empresas tanto de redes sociales como a las gigantes tecnológicas para poder obtener más información útil para resolver el caso. Google no se escapa y desde enero de 2020 empezará a cobrar honorarios profesionales para ofrecer datos de los usuarios, según The New York Times.
Para pedir la información de algún usuario de Google, las fuerzas del orden de EE. UU. tienen que hacer una solicitud formal a la empresa en la que se debe especificar qué tipo de información se requiere y, por supuesto, una orden judicial. La empresa norteamericana tendrá ahora una lista de precios en la que, dependiendo de la información que se solicite, puede variar entre los 40 y los 245 dólares.
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¿Es legal cobrar a las autoridades?
La ley federal norteamericana establece que las empresas privadas cobrar a la administración tasas por la compensación por realizar un trabajo. Contrario a otras grandes empresas, Google ha decidido imponer estas tasas, ya que parte de ese dinero sería destinado a la compensación, pues estas solicitudes requieren trabajo además de la premura con la que se hacen estas peticiones.
Una simple citación costará 45 dólares, una escucha telefónica 60 dólares mientras que una orden de registro, que ya son palabras mayores, alcanza los 245 dólares. Puede parecer poco, pero de acuerdo con el informe de transparencia que presenta Google cada año, en 2019 recibió más de 160.000 solicitudes de datos de cuentas/usuarios y que unas de cada tres solicitudes provinieron de los Estados Unidos.
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Algunos expertos dijeron a The New York Times que el hecho de que Google establezca precios por proveer datos de cuentas y perfiles a las autoridades puede ayudar a evitar la vigilancia excesiva de algunos países. Contrario a lo que pueda generar esta medida en la opinión pública, los expertos aseguran que el objetivo final de la empresa es la de proteger los datos de sus clientes.
