El riesgo de contraer malaria o paludismo y el peligro de estar a merced de irregulares armados son algunos de los obstáculos que sortean quienes deciden adentrarse en zonas mineras al sur de Venezuela. Conocimos el caso de un comerciante informal y una familia de profesionales que dejaron todo atrás por la fiebre del oro. Para ellos es una salida para no salir como migrantes