Santa Rita.- El primer teniente de la Guardia Nacional Ebert González Morles y el vigilante José Villarroel fueron asesinados en un ataque armado durante un robo en una camaronera del municipio Santa Rita, en el estado Zulia, la noche del primero de enero. Autoridades atribuyen el atentado a una banda de piratas que opera en el lago de Maracaibo.

La Procesadora Marina de la Costa Oriental del Lago (Promacol) está ubicada en el sector Punta Iguana, municipio Santa Rita. Villarroel era el vigilante de la empresa y González era un oficial que se trasladó al establecimiento por un reporte telefónico sobre un robo.

Según una minuta preliminar del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), al menos 13 hombres armados llegaron en embarcaciones por las orillas del Lago de Maracaibo y entraron por una puerta posterior de la camaronera.

A través de las redes sociales, se difundió un video en el que se observa cuando al menos 10 hombres ingresan en la camaronera por una puerta y disparan contra González y Villarroel. El teniente quedó herido y falleció en una clínica de Maracaibo.

La muerte del teniente González fue confirmada este 2 de enero en una nota de condolencia enviada por el comandante de la Guardia Nacional, Erasmo Ramos. También Promacol lamentó el fallecimiento del vigilante, quien tenía varios años prestando servicios en la empresa.

Promacol se dedica a procesar especies como camarón, pulpo, calamar, pescados y mariscos para su venta y distribución en varias zonas del país. Una fuente confirmó a El Pitazo que los sujetos están señalados como miembros de una banda de piratas del lago, quienes roban a pescadores y empresas. Los sujetos se movilizan en embarcaciones por el Lago de Maracaibo.

Desde el año 2019, pescadores en el lago de Maracaibo han denunciado que son víctimas de extorsiones y robos a manos de piratas. En abril del 2021, seis oficiales de la Policía del Zulia fueron reportados como desaparecidos después de salir a cumplir con patrullaje marítimo desde el comando lacustre de La Cañada de Urdaneta. Los policías fueron localizados con golpes y deshidratados.