Río de Janeiro.- Un francotirador de la policía de élite de la ciudad brasileña de Río de Janeiro mató al secuestrador que mantenía como rehenes a los ocupantes de un autobús y las autoridades lograron liberarlos.
De acuerdo con un informe preliminar de la Policía Militarizada (PM) en el lugar de los hechos, el hombre enmascarado que estaba armado murió cuando era trasladado en un ambulancia a un hospital cercano.
Antes del desenlace, el hombre, que había amenazado con incendiar el autobús, había liberado a cuatro mujeres y dos hombres que estaban dentro del vehículo.
Más temprano, el individuo enmascarado, armado y con gasolina, tomó como rehenes a los pasajeros y al conductor de un autobús en la ciudad brasileña de Río de Janeiro, a los que amenazó con incendiar el vehículo automotor desde su interior. Luego se supo que el arma de fuego que esgrimía contra la cabeza de uno de los rehenes era de juguete.
El suceso, que comenzó a las 5.30 am hora local (8.30 GMT), ocurrió sobre el emblemático puente Río-Niteroi, que comunica esas dos importantes ciudades de la región metropolitana de Río de Janeiro y provoca un gran embotellamiento de tráfico desde las primeras horas de la mañana.
La portavoz de la Policía de Carreteras Federal, Sheilla Sena, dijo a los periodistas que según los primeros testimonios, el hombre se identificó como policía militar, «poniendo a los pasajeros en peligro al amenazarlos conque iba a incendiar el autobús, pero se desconoce cuál es el propósito real».
La Policía Militarizada (PM), que negociaba la rendición del secuestrador, indicó a periodistas en el lugar de los hechos, que la acción pareció haber sido premeditada, aunque se desconocen los motivos que llevaron al individuo a secuestrar el autobús.
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El autobús había salido minutos antes desde Sao Gonçalo, el segundo mayor municipio del estado brasileño, y también localizado en la región metropolitana de la capital fluminense, con destino al centro de Río de Janeiro.
El tránsito en el puente, que está ubicado sobre el mar, fue interrumpido sentido Río de Janeiro y helicópteros de la PM apoyaron la acción policial.
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