Caracas.- Un paciente psiquiátrico del Hospital General Dr. Jesús Yerena, mejor conocido como Hospital de Lídice, fue asesinado a tubazos por otro compañero de internado. La víctima tenía seis años en tratamiento; de acuerdo con familiares, un disparo en la cabeza le ocasionó un trastorno mental.
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Rafael Díaz, de 35 años, antes de ser internado laboraba como empleado para una empresa de vigilancia de conjuntos residenciales. De acuerdo con un familiar, quien pidió la omisión de su identidad, hace seis años su pareja lo atacó y le disparó en la cabeza. El proyectil le causó lagunas mentales, no recordaba cosas y además quedó con un problema motor, pues no podía mover su mano y pierna izquierdas.
La familia decidió internarlo en el sanatorio de Lídice. Explican que por complicaciones económicas y de trabajo no lo visitaban con frecuencia, pero el pasado 21 de agosto recibieron una noticia que no esperaban: dos días atrás, el 19 de agosto, otro paciente psiquiátrico compañero de Rafael, en una descarga de ira lo atacó antes de ir a almorzar, aproximadamente a las 11:00 am. El hombre lo golpeó y también le pegó con un tubo que sacó de una cama.
Rafael fue trasladado a la emergencia del Hospital de Lídice, pero a las horas murió, de acuerdo con la información que dieron a los familiares de la víctima los médicos residentes del centro de salud, quienes además les comentaron que este hecho de violencia se dio porque la mayoría de los pacientes se encuentran en condiciones inestables ante la falta de medicamentos. «Nos dijeron que todo escasea, que no hay personal. Ese hombre que mató a Rafael también agredió a un enfermero. Lo conocen como ‘agudo’.
Familiares comentaron que hace un año el hospital se comunicó con ellos para que se llevaran a Rafael a su casa, pero ellos se negaron por la falta de recursos económicos.
