Caracas.- El cuerpo de una dama de 76 años terminó en el tanque de su edificio. Ana Mirella Amorer Reyes fue atacada por el vigilante de su conjunto residencial, el cual forma parte del conjunto Terrazas de Santa Fe, ubicado en el municipio Baruta, estado Miranda.
El 19 de septiembre, dos días después que vecinos de Ana Mirella notificaran a las autoridades su desaparición, funcionarios de la Policía de Baruta, en compañía a miembros del Eje de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc) y un grupo de rescatistas reunieron pruebas suficientes y determinaron que su cadáver se encontraba al del fondo del tanque de agua de su edificio.
Esto nunca lo imaginaron sus vecinas, quienes la hacían víctima de un secuestro luego que le escribieron varios mensajes a su celular y no respondió.
La última señal de vida que tenían de ella era su registro en las cámaras del conjunto residencial, cuyo audiovisual indicaba que a las 5:12 pm del 17 de septiembre había llegado al estacionamiento con su carro un Honda, modelo Civic, color plata, después de llevar a su casa a la joven que le hacía las labores de limpieza en su apartamento.
Funcionarios de la Policía de Baruta notificaron el caso al Cicpc y comenzaron con las investigaciones. Las primeras pistas de lo ocurrido llegaron la mañana del 19 de septiembre cuando el conserje del edificio encontró la cartera, teléfono celular y otras pertenencias de la dama en el cuarto donde se ubica la bomba hidráulica que suministra el agua a la torre.
Después de este hallazgo, un grupo de policías se acercó a la zona y comenzaron a buscar a la dama hasta que el olor, como dice Manuel Tangir, director de Seguridad Ciudadana de la alcaldía de Baruta, los llevó al tanque.
El funcionario indica que dieron la orden vaciarlo y a medida que bajó el agua se vio el reflejo de un cadáver. Pasadas las 4:00 pm un equipo de rescatistas logró subir a la superficie el cuerpo. Vecinos y familiares confirmaron que se trataba de Ana María, la mujer que tenía como profesión la administración y era jubilada del Banco Provincial, quien residía sola en el edificio desde hace 31 años.
De acuerdo con los datos primeros datos recabados por la policía científica, la mujer de 76 años llegó a su edificio, estacionó y, presuntamente, minutos después fue atacada a golpes con un objeto contundente por Juan Carlos Serrano, un joven de 24 años quien tenía dos semanas laborando para una empresa de seguridad y desde el primer día fue asignado al conjunto.
Juan Carlos luego de matar a Ana María huyó en su carro y salió del edificio a las 5:55 pm, según el registro de las cámaras de seguridad.
Vecinos de Parque Santa Fe detallaron que luego del hallazgo del cadáver de Ana María se encuentran consternados, pues no había pasado algo similar. Dicen que no entienden lo qué pasó y describen a la víctima como una vecina bondadosa, que ayudaba y le daba comida a quien lo necesitara.
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