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El exfiscal Franklin Nieves, quien tuvo a su cargo el caso del líder opositor venezolano Leopoldo López, ratificó este martes que recibió presiones del Ejecutivo Nacional y de sus superiores para defender pruebas falsas contra López.
«Hay muchas circunstancias por las cuales decidí guardar silencio, una de ellas fue el miedo», declaró Nieves. El exfiscal argumentó que los jerarcas que ejercían presión sobre él, serían Nicolás Maduro y Diosdado Cabello, “todo ha sido por capricho de ellos”. Nieves reiteró que la detención de López fue ordenada con anticipación al 14 de febrero y recordó las llamadas guarimbas estudiantiles y algunos arrestos hechos en el estado Táchira. Mencionó al gobernador de Táchira, José Gregorio Vielma Mora, como uno de los interesados en que se arrestara a López durante una visita que el líder opositor haría a ese estado el 10 de febrero para hacer asambleas de calle. Nieves dice que le dieron instrucciones precisas para aprehender a López si se presentaba alguna guarimba en Táchira. Pero el viaje de López no se dio por lo que debió retornar a la ciudad de Caracas. Una llamada telefónica de Joel Espinoza, su jefe directo, le ordena ir al Sebin de Plaza Venezuela, donde se reunió con el general Bernal y su hermano, Freddy Bernal, dirigente del Psuv. El general le dijo que debía solicitar órdenes de aprehensión, contra López, Iván Carratú, Carlos Vecchio, «pero no había fundamento», dice ahora el antiguo fiscal 41. Nieves declaró que le dieron instrucciones para llevar las solicitudes de captura a la juez 16 de control, pero ella le dio solo la de Leopoldo López y él la entrego a los funcionarios policiales para que la cumplieran. Aseveró que varios funcionarios fueron falsos testigos contra López y que no es el único caso en el que se violan derechos fundamentales. «El 100 por ciento de las pruebas de la investigación fueron falsas…en el Ministerio Público no hubo incendio. Eso lo inventamos los que fuimos parte de la investigación. Ni un libro se quemó… todo era falso, falsos testigos que fueron obligados a declarar de la manera en que queríamos”, declaró. Afirma que no se retiró del caso porque es un profesional de carrera y que era personal de confianza de la fiscal general Luisa Ortega Díaz, “me hubieran perseguido y no hubiesen cambiado las circunstancias y no se habría dado a conocer esta situación”. Neves indicó que Ortega Díaz sabía que las pruebas presentadas eran falsas, ya que recibía informes semanales del caso. “Tiene conocimiento de todo lo que acontecía sobre el caso de López, se enviaba información diaria de lo que acontecía, la Fiscal General tiene acceso directo a mi computadora, ella tenía conocimiento de todo eso”, dijo Nieves. «El que gira las instrucciones para el juicio a López y quien elaboró las actas fue Diosdado Cabello, presidente de la Asamblea Nacional«, dijo Nieves, quien afirmó que los poderes en Venezuela “están arrodillados”. Nieves declaró que siempre que veía a Leopoldo López en tribunales y éste le preguntaba cómo veía el caso, a lo que el exfiscal respondía, “te van a apresar y condenar para que no puedas postularte como candidato presidencial”. El exfiscal Nieves admitió este martes que sabe que violó derechos fundamentales y que no pretende evadir esa responsabilidad. Nieves declaró que una de sus hijas estudiaba con en el mismo colegio que Manuela, hija de Leopoldo López. «No puede ser que yo permití, que yo participé…en quitarle el papá a esa niña…siempre que la veía le echaba la bendición”. Referente a su salida del país destacó que «no quería permitir que pasaran 13 años y 8 meses más de esos niños sin el cariño de su padre». “Leopoldo es inocente, lo pusieron preso porque le temen a su liderazgo, le violaron sus derechos fundamentales al no permitir testigos durante su juicio, estamos a la orden para que se sepa toda la verdad” dijo Nieves para concluir. Las declaraciones las dio en el programa Conclusiones, conducido por Fernando del Rincón, en CNN. El periodista señaló que ha hecho 16 llamadas a la Fiscalía General y otras tantas llamadas y correos para obtener respuesta oficial del presidente Nicolás Maduro, sin éxito.