Cumaná. Pálidos, cadavéricos y muertos de hambre. Así describieron varios familiares a los 19 presos que llegaron el 10 de junio al Internado Judicial de Cumaná, estado Sucre.
Venían de El Dorado, pero antes 18 de ellos fueron golpeados y rechazados. Uno de ellos, identificado como José Agustín Astudillo Dimas, de 31 años, estaba muy enfermo y a los tres días de llegar al recinto murió de paludismo, presuntamente, reportó el Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP) mediante una nota de prensa.
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Astudillo Dimas estaba penado y permaneció tres años en el Internado Judicial de Cumaná. Hace dos años y medio fue trasladado a El Dorado.De acuerdo con el OVP, fueron nulos los exámenes practicados a este recluso, pero la sospecha apuntaba a que contrajo paludismo.
El preso murió pesando 30 kilos .“Estaba en el hueso”, decían repetidamente sus allegados. Trascendió que el sujeto perdió al menos 50 kilos. Su familia no lo visitaba, relataron algunos compañeros al equipo del Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP).
“El compañero nunca fue sacado. Él pedía ayuda porque tenía fiebre. Ya la comida no le pasaba, pero nunca lo atendieron. Así como la de él, aquí son constantes las muertes por enfermedades, y nadie nos brinda ayuda. Estamos olvidados”, aseguró un privado de libertad de El Dorado al OVP.
Agua de arroz para comer
Uno de los familiares afirmó además que «era poco lo que comía el hoy fallecido, pues la comida que recibían era de muy mala calidad. En ocasiones eran bollos solos; otras veces agua de arroz o agua de lenteja». La misma persona indicó que esta comida era para toda la población carcelaria, o por lo menos para los que estaban en máxima.
Los 19 presos trasladados desde El Dorado perdieron entre 50 y 30 kilos, de acuerdo con los familiares, que solicitaron resguardar sus nombres.
Golpeados
Los parientes afirmaron también que luego de llegar al penal de Sucre, 18 presos fueron rechazados. «Pero los funcionarios del Ministerio de Asuntos Penitenciarios, por una supuesta orden del director de ese penal, les proporcionaron una paliza, para lo cual usaron una tabla», afirmó una de las fuentes.
«Estos reclusos estaban en ese penal con anterioridad, pero el 25 de junio de 2018, luego de participar en un motín donde sometieron a trabajadores, fueron trasladados 24 presos a El Dorado, y siete internos, entre los que estaban los líderes del penal, a Vista Hermosa, ambos penales ubicados en el estado Bolívar», añade la nota de OVP.
Los presos rechazados fueron trasladados al Centro Penitenciario Agroproductivo José Antonio Anzoátegui, mejor conocido como Puente Ayala, ubicado en el estado Anzoátegui.
Los familiares afirmaron que en este penal de Anzoátegui también reciben poca comida y denunciaron además traslados arbitrarios y retrasos procesales.
El coordinador general del OVP, Humberto Prado, denunció que estos traslados son una forma de castigo, como también lo son el retardo de sus procesos judiciales, la mala alimentación, la falta de atención médica y el brote de enfermedades en los penales. Prado responsabilizó de estos hechos al Ministerio de Asuntos Penitenciarios, pues estos presos están bajo su tutela.
