La Ivermectina es uno de los medicamentos más solicitados en las farmacias del estado Zulia. Su venta se disparó luego de que el gobernador del estado, Omar Prieto, instara el 5 de enero a usar el antiparasitario para la prevención y para el tratamiento del COVID-19, pese a que no está comprobado científicamente que tenga beneficios para combatir el coronavirus.
“Me voy a tomar mis dos pastillas, y al tercer día se vuelve a tomar dos pastillas más. Y así mensualmente. (…) Se la vamos a dar a todos”, dijo el mandatario en su programa de radio.
Especialistas en infectología, virología, médicina interna y de la Federación Médica Venezolana aconsejan a la población a no tomar Ivermectina porque no hay estudios que demuestren su eficacia contra el COVID-19.
“No hay ninguna indicación en el mundo de la prevención de la Ivermectina hasta el día de hoy para el tratamiento del coronavirus. Quien toma ese medicamento está expuesto a su efectos secundarios muy probablemente sin tener ningún beneficio real de tomar la Ivermectina”, aseguró en entrevista con El Pitazo el médico infectólogo Julio Castro, profesor del Instituto de Medicina Tropical de la Universidad Central de Venezuela.
Castro, también médico internista, insistió en que la Ivermectina no es una droga aprobada para el uso clínico y mucho menos para la prevención del coronavirus. Además, dijo que no hay en el mundo ninguna indicación para tomar el fármaco todos los meses. “Eso no existe”.
La Ivermectina, conocido por su uso como antiparasitario en animales, está aprobada para el uso en humanos para enfermedades como la oncocercosis, la escabiosis y algunas parasitosis. Tanto la Organización Mundial de la Salud (OMS) como la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos de América (FDA) cuestionan sus beneficios para mejorar síntomas de coronavirus.
La FDA indicó el 16 de diciembre de 2020 que la Ivermectina no está aprobada para el tratamiento del COVID-19. Explicó que un artículo de investigación recientemente publicado describe el efecto de la Ivermectina en el SARS-CoV-2 en un laboratorio, pero que estos tipos de estudios se usan comúnmente en una etapa temprana del desarrollo de fármacos. “Se necesitan pruebas adicionales para determinar si la ivermectina puede ser apropiada para prevenir o tratar el coronavirus o el COVID-19”.
El virólogo Andrés Soyano, miembro del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (Ivic), explicó que la ivermectina no tiene ningún efecto antiviral. “Hasta ahora en ninguna parte se ha hecho un estudio serio para demostrar si sirve o no sirve. Hasta ahora, no hay ninguna tratamiento adecuado, preventivo ni terapéutico para el COVID-19”.
Advirtió a la población a no usar el fármaco sin ninguna prescripción médica. “Hacerlo en exceso puede generar efectos adversos”.
Recetado a pacientes del HUM
Los médicos tratantes del Hospital Universitario de Maracaibo en el estado Zulia disponen de la Ivermectina para tratar a pacientes con COVID-19, e incluso se le dona al personal de salud que lo desee, según informó una fuente médica.
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“Hay suficiente Ivermectina y la recibe el paciente que el médico tratante lo considere”, agregó un médico del principal centro de salud en Zulia.
Según el gobernador Omar Prieto, el medicamento ya fue distribuido a toda las red hospitalaria pública dirigida por su hermana, la doctora Omaira Prieto.
El tratamiento con ivermectina no es recomendado por la Federación Médica de Venezuela, Su presidente, el doctor Douglas León Natera, también recomendó a la población a no tomar el antiparasitario. “Nosotros no lo indicamos. (…) No la recomiendo porque no está demostrado que ese medicamento sea efectivo con el coronavirus”, dijo en entrevista telefónica.
Natera alertó que el uso permanente del medicamento pudiera atentar contra la flora intestinal, aunque reconoció que los niveles de toxicidad de la ivermectina son bajos.
Para el representante de la Federación Médica, sólo el lavado de las manos, el distanciamiento social y el correcto uso de la mascarilla y lentes previene el contagio de coronavirus.
En la práctica
La médica internista Eriamna Granadillo recetó a mediados de 2020 a sus pacientes la ivermectina al enterarse de pequeños ensayos clínicos sobre algunos posibles beneficios, pero desistió ante pocas evidencias científicas.
“La llegué a recetar porque al principio de la pandemia no teníamos certeza de lo que podía funcionar o no; pero a medida que evolucionó el 2020, nos dimos cuenta de que no lo indican. No hay estudio científico que avale que la ivermectina tiene un efecto contra el COVID-19. No podemos recomendarla, mientras eso no suceda”, dijo la doctora en entrevista telefónica.
A diferencia de Granadillo, hay médicos que sí consideran prudente el uso de la ivermectina cuando se presentan síntomas asociados al COVID-19 o cuando una persona estuvo en contacto con algún infectado.
Uno de ellos es Franz de Armas, médico internista, quien aseguró que hay ensayos in vitro y clínicos que demuestran que la droga tiene propiedades antivirales y su efectividad para destruir el virus. Dijo que por sí sola no combate el COVID-19, pero puede usarse como complemento del tratamiento.
Indicó que el medicamento no previene el coronavirus, ya que su efecto solo ocurre cuando el virus está dentro del organismo. Lo consideró una opción para el personal de salud que se mantiene expuesto al contagio.
Una caja de cuatro pastillas de ivermectina en Zulia se vende en cerca de 8.000.000 de bolívares en las farmacias en las que aún hay disponibilidad. La Gobernación de Zulia inició la producción del medicamento en el laboratorio de su propiedad SM Pharma para la distribución masiva, según aseguró el gobernador Omar Prieto.
