Enfermeros denuncian que en el centro de salud no hay más espacio para pacientes COVID-19 | Foto: referencial
Caracas.- El Colegio de Enfermería del estado Bolívar denuncia que hay un retraso en el plan de vacunación contra el COVID-19 del personal de salud de la entidad. La primera dosis de la vacuna rusa Sputnik V solo ha sido puesta al personal del Hospital Ruiz y Páez de Ciudad Bolívar.
El vicepresidente del Colegio de Enfermería, Camilo Torres, explicó a El Pitazo en una llamada telefónica, que todavía faltan más de cuatro mil trabajadores del sector. Aseguró que no han vacunado en los del hospital del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales Héctor Noel Joubert, los ambulatorios tipo III, los CDI o salas de rehabilitación de Barrio Adentro y clínicas privadas que atienden pacientes COVID-19.
En horas de la madrugada de este lunes, 15 de marzo, un feto de aproximadamente 30 semanas de gestación apareció a las afueras de los bajantes del Hospital Central de San Cristóbal, según confirmó a los medios de comunicación el director del primer centro asistencial, Régulo Lobo.
Lobo indicó que el personal de mantenimiento del hospital realizó el reporte a la dirección y de allí informaron al Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), quienes se encargaron del levantamiento del cuerpo y de recabar pruebas para el esclarecimiento del hecho.
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Dos jóvenes dijeron a sus familiares que saldrían a pasear; a las 3:00 pm fueron vistas por última vez en la estación del metro Gato Negro. En la noche comenzó la búsqueda y como no había rastro de su paradero, su abuela y la mamá de la adolescente acudieron a una oficina del Cicpc a formalizar la denuncia por su desaparición.
Al momento de su hallazgo, la adolescente de 13 años tenía hematomas en el rostro con una data de una semana. Ella aseguró que antes de fugarse de casa su mamá, Emily Victoria Rivero Marín (50), le había propinado una golpiza. Estos eventos ocurrían constantemente, según dijo a la policía.
Asimismo, la joven de 15 años confesó que desde los 8 años era abusada sexualmente por su padre, el mismo a quien pidió protección para huir del maltrato de su abuela, Miriam Lisseth Hidalgo Medina (50). A la adolescente se le realizó un examen forense que confirmó su testimonio: presentó lesiones por abuso sexual que tenían una data de siete años.
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