Pese a la lluvia, feministas y venezolanos se movilizaron este jueves hasta la sede de los tribunales en Argentina para exigir justicia en el caso de la joven venezolana de 18 años de edad que fue abusada por Irineo Humberto Garzón Martínez, ciudadano argentino, dueño de una tienda de uniformes.
La joven se postuló a una oferta de trabajo publicada en Facebook por Garzón Martínez en el grupo «Venezolanos en Argentina». El agresor solicitaba una vendedora para atender la tienda Uniformes Garzón. El hombre primero le pidió que se reunieran en un bar para hacer la entrevista, a lo que ella se negó. Luego le indicó entonces que la entrevista sería en el local y la joven accedió. Según testimonio de Thays Campos, madre de la joven, el hombre drogó a su hija tras darle un vaso con agua al que agregó una sustancia y abusó sexualmente de ella.
Garzón Martínez fue detenido de inmediato, presentando ante las autoridades y se le imputó el delito de «abuso sexual simple», que prevé condenas de 1 a 4 años de prisión. Tras dos días detenido, y por decisión de la jueza Karina Zucconi, el hombre fue liberado. La funcionaria que es titular del Juzgado Nacional Criminal y Correccional N°15 consideró que, por no tener antecedentes penales, podía seguir el proceso en libertad.
La decisión causó indignación en la comunidad venezolana residenciada en ese país, así como también en la sociedad argentina, especialmente para el movimiento feminista que opera en ese país. Luis Pulido, periodista venezolano en Argentina, conversó con El Pitazo sobre este caso.
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