Caracas. A 93 años de la salida al aire de la primera emisora venezolana, AYRE, que transmitía en amplitud modulada (AM) para Caracas, Venezuela celebra este jueves 6 de junio el Día de la Radiodifusión con medios radiales cuyos transmisores son progresivamente apagados por la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel).
Algunas emisoras también han terminado afectadas por el robo de sus equipos, reporta Medianálisis, una organización dedicada el estudio y capacitación de los medios de comunicación.
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En los últimos cuatro meses de este año han salido del aire al menos cuatro estaciones. El caso más reciente y emblemático fue el de la pionera de la radiodifusión venezolana Radio Caracas Radio (RCR 750 AM).
Ocurrió la mañana del 30 de abril durante la transmisión del alzamiento militar a favor de Juan Guaidó.
Con anterioridad, Conatel paró la transmisión de al menos 40 emisoras durante 2017, entre ellas 92.9 FM y Mágica 99.1 FM, reseña el Instituto de Prensa y Sociedad (Ipys Venezuela).
Agrega que un año después, la mitad mantuvo sus antenas apagadas y la otra volvió al aire. Sin embargo, en ambos casos esperan a que el Estado responda a sus trámites para renovar sus permisos.
De acuerdo con los análisis de Ipys Venezuela, se trata de la medida «más abusiva y desproporcionada» que ha tomado Conatel en los últimos 12 años, sólo es comparable con la actuación que tuvo en 2009, cuando ordenó el cierre de 32 medios radioeléctricos, mediante una decisión que firmó Diosdado Cabello, entonces director.
Medianálisis advierte que la línea editorial de los medios se enfrenta en los últimos años a diversos problemas, entre los cuales destacan las agresiones y la impunidad ante éstas, así como las amenazas o medidas administrativas de sanción.
«Más de la mitad de los entrevistados atribuye estas agresiones al gobierno y uno de cada cuatro a grupos de origen desconocido. (…). Lo cierto es que dos de cada cinco periodistas consideran que la situación afectó negativamente, en gran medida, el desempeño de sus funciones», concluye la organización en un estudio titulado Situación del periodismo en Venezuela, de 2018.
Ipys Venezuela indica que la radio en Venezuela enfrenta un obstáculo administrativo común para tramitar sus permisos: la falta de respuesta del Estado a las peticiones de asignación o renovación de concesión, «lo cual encuentra amparo en la Ley Orgánica de Telecomunicaciones».
«La Ley vigente admite una política de silencio administrativo que atenta contra el derecho humano a la libertad de expresión. La reforma propuesta por la Asamblea Nacional en 2016, con mayoría opositora al Gobierno, no lo solucionaba», subraya Ipys en el estudio Emiroras en vilo.
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