Este jueves 20 de agosto, el presidente encargado de Venezuela, reconocido así por más de 50 países, hizo un llamado público a los diferentes liderazgos políticos del país para trabajar, juntos, en una hoja de ruta que puedan presentar al país en 10 días.
¿Ultimátum, llamado de atención, grito de desesperación o muestra de unidad? Quizás pueda ser un poco de todas las opciones. Lo cierto es que, a poco más de tres meses para el proceso electoral del 6 de diciembre y a poco más de dos semanas después de que anunciaran formalmente la no participación en el proceso, la oposición sigue buscando consensos para presentar el tan esperado qué hacer, no solo ante el proceso sino después de que se dé.
Y éste ha sido el punto más cuestionado por expertos y distintas organizaciones sociales: que se haya decidido no participar, pero no se haya dicho o mostrado una estrategia que acompañe esa decisión.
Hasta la hora de publicación de este trabajo, ni María Corina Machada ni Henrique Capriles habían reaccionado al llamado de Juan Guaidó. Henry Ramos Allup y Leopoldo López replicaron el mensaje.
GUAIDÓ CONVOCA A LÍDERES OPOSITORES A SUSCRIBIR PACTO UNITARIO EN LOS PRÓXIMOS DÍAS
Sin embargo, los dirigentes Delsa Solórzano y Andrés Velásquez, aludidos en el llamado, han manifestado su disposición a buscar esa tan esperada unidad.
Guaidó apeló a recordar la unidad que sirvió para que la oposición ganara los dos tercios de la Asamblea Nacional en 2015, sin embargo, desde distintos sectores sociales se ha señalado que la oposición debe superar la alianza netamente electoral, la cual, sin dudas, le ha dado resultado en ocasiones anteriores.
Los apoyos
La diputada Nora Bracho, miembro de Un Nuevo Tiempo, expresó su respaldo y el de la organización ante la solicitud de Guaidó para una ruta unitaria.
Para ella es importante seguir en la lucha por la restitución de la democracia y está convencida de que, “muy pronto” habrá buenas noticias y que esperan un anuncio de Guaidó aunque no especificó en referencia a qué.
Se muestra además optimista y dice que se irán dando los resultados aunque entiende, dice, que la población ha esperado mucho por un cambio.
“Nadie sabe las goteras de la casa ajena, pero a pesar de ello seguimos trabajando por lograr un mejor país”, señala.
El diputado Carlos Prosperi, militante de Acción Democrática, también ve viable que en 10 días puedan llegar a acuerdos mínimos y presentarle al país un plan. Incluso dice que pudieran llegar a ese acuerdo antes de esos 10 días.
Mientras que Edgar Zambrano, también de Acción Democrática, sostiene que todo llamado a la unidad de los venezolanos debe ser valorado “en su exacta dimensión”.
“El país atraviesa una circunstancia extremadamente gravosa desde el punto de vista político, social y económico, que amerita el esfuerzo de todos. En distintas oportunidades innumerables vocerías nacionales han dicho que un solo sector no puede. Es imprescindible tomar el sentimiento de unidad nacional para, entre todos, orientar una estrategia que funde las bases de ganar-ganar para todos los venezolanos. El tiempo enunciado por Guaidó, si hay voluntad política y democrática, pudiese ser inferior a esos diez días”, indica Zambrano.
Ante este llamado de Guaidó, el diputado Juan Pablo Guanipa, miembro de Primero Justicia, indicó: “comparto su contenido. Es necesario que nos presentemos en unidad, con estrategia y acciones, ante la ciudadanía venezolana, el sector militar y la comunidad internacional. Ya tenemos un papel de trabajo cuya concreción se logrará con la participación activa de esos sectores”.
También asegura que en ese plazo de 10 días lograrán tener listas las propuestas.
Apoyo, pero no un cheque en blanco
Omar González, diputado y miembro de Vente Venezuela, aclarara que el apoyo depende de los objetivos.
Aunque fue pública, González manifiesta que esperan la concreción de la invitación.
En sintonía con los objetivos y el plazo de 10 días, el parlamentario es tajante al expresar que, “si buscan una hoja de ruta como la actual, sí. Si son los mismos sectores, los del G4 con su conocida vocación de exclusión y sectarismo, sí. Si es la misma estrategia de buscar diálogo con el chavismo en el poder, en un día incluso”.
Y agregó que “si el objetivo es el de sacar a Maduro, la cosa cambia y se podría construir con un diálogo franco”.
González insiste en que, desde Vente Venezuela tienen una “hoja de ruta perfectamente diseñada convencidos de que es la única vía: la conformación de una coalición internacional para lograr la liberación de Venezuela” que, expresa, requeriría de la Asamblea Nacional y un liderazgo firme.
Defiende que no se trata de un llamado a una invasión sino a una “operación multifacética para lograr ayuda humanitaria, mejoras en las condiciones de vida y la neutralización de los grupos irregulares que operan en el país”.
Los escenarios
Andres Caleca, exrector del Consejo Nacional Electoral (CNE), participó en el foro chat Café con El Pitazo y allí manifestó que la exigencia es que se suspenda el proceso y que se logren condiciones mínimas el año que viene.
Pide a la dirigencia opositora que, dada la disyuntiva sobre qué hacer, se una al recurso de suspensión que se introdujo en el TSJ.
Ante este escenario, la diputada Bracho no quiso adelantar opinión e indicó que los escenarios serán anunciados “pertinentemente” por Guaidó y además que habrá consenso entre los partidos en lo que se decida. “Todos tenemos un objetivo común: librar a Venezuela de esta tragedia”, señala.
Por su parte, González insiste en que las vías electoral y del diálogo ya se han explorado y han fallado.
En cuanto a la suspensión dice que en el país no hay leyes y que ya Venezuela es un Estado fallido por cuanto operan en el territorio grupos irregulares.
Para el director del Centro de Estudios Políticos y de Gobierno de la Universidad Católica Andrés Bello, Benigno Alarcón, “una de las cosas que se impone hoy en día es mayor y mejor comunicación entre el liderazgo político y social. Una ciudadanía inteligente no está para que le bajen líneas”.
Considera que el plazo de 10 días parece corto para construir consensos tomando en cuenta los múltiples sectores a escuchar.
En cuanto a las posiciones que han manifestado distintos líderes políticos y que parecieran irreconciliables, Alarcón recuerda que la unidad nunca es perfecta y ve difícil que se puedan conseguir puntos medios entre esas posiciones.
Alarcón tampoco ve posible una suspensión del proceso y cree que la oposición puede, en cambio, aspirar a generar una gran abstención y el desconocimiento internacional.
El analista político considera además que la calificación de Estado fallido responde a un índice que es relativo.
“El ser calificado de Estado fallido no genera ninguna consecuencia relacionada con una salida. El mundo está lleno de Estados frágiles y fallidos gobernados por regímenes autoritarios longevos”, recuerda Alarcón.
Finalmente señala que, aunque la consulta podría ser una opción, es importante evaluar la disposición de los venezolanos a participar no solo en medio de la pandemia sino además por el significado que puede tener una consulta al recordar lo ocurrido el 16 de julio de 2017.
