Caracas.- El simulacro electoral, previo a las cuestionadas elecciones parlamentarias fijadas para el 6 de diciembre, se realizó este domingo, 25 de octubre. En la capital, las colas fueron, en su mayoría, de personas de la tercera edad afectas al partido de Gobierno. En varios liceos y colegios, muchos votantes vestían franelas con estampados, como los ojos de Hugo Chávez o consignas de apoyo a Nicolás Maduro.
En la escuela municipal Andrés Bello, ubicada en Chacao, Elena Medina apoya a la comunidad, según contó, incentivando a la participación política y al derecho al voto. “La idea es que la gente aprenda. La participación para el 6 de diciembre es para seguir perpetuando el socialismo, para que se recupere la Asamblea Nacional. Mucha gente ve el socialismo como algo malo, pero, al contrario, es un proyecto de país, es un proyecto para la trascendencia”, afirmó.
La cola, que ocupaba cerca de una cuadra, se dividía en dos al llegar a la entrada de la institución: electores del centro y electores de otros sectores. Elena Medina admite que hubo más asistencia de la que pensaron quienes forman parte de los consejos comunales y los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (Clap).
La cantidad de votantes de Chacao no se compara con la multitud que esperaba afuera de la unidad educativa nacional Dr. José de Jesús Arocha, de la parroquia Petare. En las puertas del lugar había no menos de 10 funcionarios del Consejo Nacional Electoral (CNE) y de la Guardia Nacional. Las colas bordeaban la institución por completo.
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Eric Pernía, de Caucagüita, llegó a las 10 am y a las 11 seguía esperando. Decidió participar en el simulacro para conocer cómo es el proceso con las nuevas máquinas, pero, sobre todo, porque le parece que es necesario retomar el Parlamento. “Desde que los opositores lograron la mayoría no han hecho nada positivo”, indicó. Cree que con los candidatos provenientes de su zona podrá dárseles fuerzas a las ideas y proyectos generados en los barrios del municipio. Considera que mucha gente no votará por apatía o descontento con la conflictividad sociopolítica venezolana.
Votar para reclamar
En el liceo Andrés Bello, de la parroquia Candelaria, Isaac Benedetti quería enterarse de los detalles del nuevo mecanismo de votación. Está convencido de que participar le garantizará el derecho a exigir que se cumplan con las leyes. “No hay alternativa, hay que votar”, refirió, y aseguró que si el chavismo recupera la mayoría de las curules, podrán “luchar contra los países que atacan a Venezuela, que le tienen envidia por sus recursos”.
José Ramón Rivero, candidato por el estado Bolívar, también asistió a ese centro electoral y afirmó que quienes apoyan a Nicolás Maduro esperan poder enfrentar las sanciones al Gobierno y revertir todas las decisiones que, según él, tomaron los diputados del Parlamento luego del desacato impuesto por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ). “Votar es un derecho y es mejor resolver las cosas a través del voto”, expresó.
“Vine porque quiero que se arregle lo que la oposición destruyó”, manifestó Yenny de Pinzón, habitante de la parroquia Catedral y quien hacía cola para entrar al liceo Fermín Toro, en El Silencio. Espera que el 6 de diciembre no pase nada malo y que los candidatos del chavismo ganen. Sobre quienes no quieren votar ese día, ella dice: “Que salgan a votar para que tengan derecho al reclamo”.
Mientras Yenny de Pinzón hace la cola, una mujer sin identificación les asegura a las personas que esperan que luego de participar en el simulacro pueden pasar por el punto rojo para un escaneo que les permitirá conocer beneficios de las misiones y programas del Estado.
Hacia el oeste de Caracas, en el liceo Miguel Antonio Caro, Luis España, de la parroquia Sucre, confía en que la Asamblea Nacional sea la solución para la crisis que atraviesa el país. Participa porque rechaza que muchas personas se abstengan y luego se quejen de las irregularidad y precariedades de las condiciones de vida.
