Nicolás Maduro se pronunció este sábado, 13 de junio, sobre la designación de los nuevos rectores del Consejo Nacional Electoral (CNE) por parte de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), luego de aplicar una omisión legislativa a la Asamblea Nacional. Aseguró que la acción fue completamente legal y apegada a la Constitución, además de saludar y dar su visto bueno al recién nombrado Poder Electoral.
«Gente de una gran trayectoria profesional, todos, gente de un gran conocimiento de la vida institucional del país y de las leyes y del sistema electoral, que efectivamente llega para darle un nuevo dinamismo a todo el proceso electoral y para organizar las elecciones para diputados y diputadas de la Asamblea Nacional», dijo.
Fue enfático en destacar que por mandato constitucional, es obligatorio realizar elecciones legislativas este año debido a que se vence el período del Parlamento. «Pasaron cinco años de esta Asamblea que se va, cinco años totalmente perdidos, cinco años conspirando, dividiéndose, y ahora los últimos años repartiéndose la riqueza del país, robándose entre sí mismos», agregó.
Igualmente, informó que para 2021 deberán realizarse elecciones para elegir nuevos gobernadores y un año después, en 2022, para alcaldes, según el cronograma electoral del país. Recordó que a mitad del período presidencial existe la opción de convocar un referendo revocatorio de su mandato, que en su caso, podría realizarse a partir del 10 de enero del 2022, a pesar de que ya en 2016 los intentos de llevar a cabo esa iniciativa por parte de la oposición habían sido frustrados precisamente por parte del TSJ y la rectoría del CNE saliente.
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El gobernante afirmó que el nombramiento de los nuevos rectores del Poder Electoral fue producto de un extenso diálogo entre el ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez, y sectores minoritarios de la oposición entre los que mencionó a los excandidatos presidenciales Henri Falcón y Javier Bertucci, así como a los dirigente políticos Claudio Fermín, Felipe Mujica, Timoteo Zambrano, y la facción del partido democristiano Copei intervenida por el TSJ. No dudó en calificarlos como los «líderes de la oposición».
Igualmente, también reveló que sostuvo reuniones con lo que denominó el G-4, conformado por los principales partidos opositores que integran la Asamblea Nacional, «Yo personalmente me reuní este año dos veces con los jefes del G-4. Hablamos de un acuerdo humanitario, no voy a decir con quién, pero hablamos de avanzar en la agenda electoral, instalamos la comisión de postulaciones de la Asamblea Nacional para que hiciera un trabajo de avanzada, pero luego llegó la pandemia, la oposición se dividió aún más y el Tribunal Supremo tomó cartas en el asunto«, aseveró.
Maduro agradeció a la presidenta saliente del CNE, Tibisay Lucena, quien por 14 años ocupó el cargo junto a Sandra Oblitas y Socorro Hernández, quienes también cesaron en sus funciones luego de diversos comicios organizados, entre ellas la propia elección y reelección de Maduro en 2013 y 2018, la elección de la Asamblea Nacional en 2015, y posteriormente de la cuestionada Asamblea Nacional Constituyente, en 2017.
El mandatario insistió en la vía electoral como único camino para resolver los conflictos políticos en el país, a la vez que aseguró que en Venezuela están dadas todas las condiciones para acudir a un proceso de votación, pues a su juicio, el Sistema Electoral «es el más transparente y capacitado del mundo».
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