La directiva irregular de Luis Parra se reunió por cuarta vez para juramentar dos personas como diputados y conformar una comisión que indague el destino de recursos humanitarios por parte de la oposición / Foto: Lewin Granados
Caracas.- La facción de diputados disidentes de oposición, con el apoyo del chavismo, anunció este martes 28 de enero la creación de un comité especial que, según el bloque que encabeza el parlamentario Luis Parra, investigará el manejo de recursos internacionales para programas de ayuda humanitaria en Venezuela durante la gestión de Juan Guaidó al frente de la Asamblea Nacional (AN) en 2019.
La propuesta fue realizada por la bancada del Gran Polo Patriótico. Antes del inicio de la reunión, el diputado Willian Gil (Psuv), quien también ejerce como constituyente, solicitó a Parra y su directiva electa irregularmente que se incluyera un debate sobre el destino del dinero recabado en el concierto Venezuela Aid Live en Cúcuta (Colombia), el “robo de los activos” y “el desfalco” de filiales estatales en el extranjero como Citgo y Monómeros.
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La modificación fue aprobada “por mayoría evidente”.
Gil, a su vez, acusó a la administración de Guaidó de haber manejado el año pasado más de 460 millones de dólares otorgados, según dijo, por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid, por sus siglas en inglés).
El diputado José Brito, investigado junto a otros seis legisladores por supuestas acciones en la Fiscalía colombiana a favor del empresario colombiano detrás los Clap, Álex Saab, fue el encargado de abrir el debate. Durante su intervención, el exmilitante de Primero Justicia (PJ) señaló que por investigar el manejo de fondos en la oposición fue desafectado de la Comisión de Contraloría de la AN.
“Freddy Superlano me dijo que le echara tierrita al ‘Cucutazo’ y yo me negué”, dijo al referirse a la supuesta malversación de recursos durante el intento de ingresar ayuda humanitaria al país del 23 de febrero pasado. Aseguró que él, junto al diputado Adolfo Superlano, emprendió una investigación en Colombia que lo llevó a descubrir irregularidades en la administración de la filial petrolera de Pdvsa, Monómeros.
Si bien no presentó pruebas de estas aparentes anomalías, insistió en que al no prestarse para ocultar estos presuntos hechos de corrupción, “la mafia del G4” -los principales partidos de oposición- lo terminó implicando “en una olla”.
De acuerdo con el legislador José Antonio España, entre fundaciones controladas por familiares de dirigentes de Voluntad Popular (VP) se habría armado una estructura para desviar el dinero proveniente del exterior.
A pesar de haber sido sancionado por el Departamento del Tesoro el pasado 13 de enero, Brito pidió a congresistas demócratas y republicanos de Estados Unidos que colaboren con la investigación para llegar al fondo del caso y develar la que, a su juicio, sería “la mayor trama de corrupción de la historia de Venezuela”.
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“Son unos chulos y los chulearon a ustedes (EE. UU.) y también a los venezolanos. Por eso apoyo que se abra una investigación exhaustiva, porque hasta discotecas y centros de lenocinios (prostíbulos) saldrán a relucir”, manifestó.
Por su parte, el diputado José Antonio España, miembro del partido Cambiemos, propuso que la comisión especial que indague en el manejo de fondos por la oposición incluya a legisladores “afectos a Guaidó” para revestir de objetividad y credibilidad a la investigación.
De esta manera, la plenaria presente en el hemiciclo de sesiones aprobó conformar el comité con los parlamentarios: “Ilenia Medina (Patria para Todos), José Brito (expulsado de PJ), Williams Gil Linares (Cuentas Claras), Adolfo Superlano (Cambiemos), Omar Ávila (Unidad Visión Venezuela), Ángel Medina (PJ) y Enrique Márquez (Un Nuevo Tiempo). Estos dos últimos, quienes se encontraban en una sesión paralela de la Asamblea Nacional legítima, rechazaron su inclusión en este mecanismo, pues no reconocen las decisiones de la facción de Parra.
Además de la presidencia en la AN de Guaidó el año pasado, Brito pidió que la comisión extienda su investigación a los períodos legislativos que lideraron los diputados Henry Ramos Allup, Julio Borges y Omar Barboza. Alegó que “todos recibieron dinero de Estados Unidos”.
Por otra parte, José Brito se refirió a la «rebelión» que, según él, se gestó a fines del último periodo legislativo en contra de la dirigencia política que lidera el Parlamento. Dijo que los legisladores Juan Pablo Guanipa como Tomás Guanipa formaban parte de su disidencia, pero que ambos desistieron luego que les ofrecieran la jefatura virtual de PJ y un alto cargo en Monómeros, respectivamente.
De acuerdo con Brito, al menos 75 parlamentarios respaldaban su causa, pero que la mayoría fue intimidada por amenazas de sanciones. «No sabía que una visa americana importara tanto a un grupo de diputados», criticó.
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Durante su cuarta sesión de enero, la directiva irregular de Luis Parra avanzó en sus maniobras para ampliar a los miembros de la denominada fracción Venezuela Unida. Amanda Linares y Edmundo Prieto juraron como parlamentarios “una vez se verificaron sus credenciales”, aseguró Brito.
Amanda Linares es militante del partido La Causa R. Se encuentra de tercera en la lista que encabeza la diputada Dennis Fernández por el estado Cojedes por lo que no le corresponde asumir una curul en la cámara. Similar situación presenta el caso de Prieto, quien es coordinador general nacional de la agrupación Vamos Adelante y aparece cuarto en la lista del estado Nueva Esparta al frente del diputado Tobías Bolívar de Acción Democrática. Tanto Bolívar como Fernández se encuentran en ejercicio de sus funciones, por lo que estas juramentaciones no podrían considerarse lícitas.
Sin embargo, ya se suman cinco integrantes del voto lista que se han juramentado en la sede del Parlamento durante este año.
“Sí tienen su credencial entregada por la junta regional del CNE en los estados, ¡claro que son diputados! Lo que pasa es que quieren mentirle al país y se creen el CNE para estar diciendo quién puede ser suplente y quién no (…) Es una manipulación, pero vendrán más juramentaciones”, señaló Brito al finalizar la sesión para defender la incorporación de los legisladores suplentes.
Nuevamente quedó en entredicho la existencia del quórum reglamentario en los actos que encabeza Luis Parra. El secretario de su junta directiva, Negal Morales, informó este lunes al inicio de la “sesión” que contaban con el número necesario de legisladores en el hemiciclo de sesiones, sin embargo se evidenciaron más de 30 curules vacías mientras transcurrían los debates.
En la última sesión, correspondiente a la conmemoración a los 62 años de la caída de la dictadura del general Marco Pérez Jiménez, Morales aseguró que, aunque la verificación del quórum se hizo por mayoría evidente, el acto contó con al menos 86 diputados, dos más del mínimo exigido por el Reglamento Interior y de Debates.
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