Centenares de personas se sumaron este domingo a una «marcha por la dignidad y el respeto a los ciudadanos de Colombia», en respuesta a la decisión del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, de cerrar el principal paso fronterizo entre ambos países y a la deportación masiva de colombianos.
Vestidos unos con camisetas blancas y otros con las amarillas de la selección nacional de fútbol, los manifestantes, que llevaban banderas de Colombia, globos y pancartas, partieron del Templo Histórico de Villa del Rosario, al lado de Cúcuta, capital del departamento de Norte de Santander, ambas ciudades colindantes con las venezolanas de San Antonio y Ureña, en el estado de Táchira.
Al ritmo de música de tambores, la multitud, encabezada por el gobernador de Norte de Santander, Édgar Díaz, inició la caminata detrás de una pancarta que dice «Por la dignidad y el respeto a los colombianos».
Entre los manifestantes hay también venezolanos, como una mujer mayor que lleva una camiseta con la frase: «Soy Venezuela, soy Colombia» y se protege del sol con una gorra con la bandera del país vecino.
«Los exiliados de Cuba y de Venezuela condenamos al comunista convicto ‘Nicolás Podrido’, que se divierte bailando cumbia mientras los pobres que atropelló y deportó sufren y lloran», reza una pancarta enarbolada por un hombre de unos 70 años.