Caracas.- Este viernes, 13 de agosto, la delegación del gobierno de Nicolás Maduro, encabezada por el presidente de la Asamblea Nacional electa en diciembre de 2020, Jorge Rodríguez, y la de la oposición que lidera el titular de la Comisión Delegada del Parlamento electo en 2015, Juan Guaidó, conformada por Tomás Guanipa y Stalin González, se sentarán en una nueva mesa de diálogo y negociación, esta vez en territorio mexicano, para tratar la crisis política venezolana.
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Todos han movido sus piezas en la previa de este nuevo proceso de negociación, auspiciado por Noruega y México, y los líderes de cada grupo han manifestado qué buscarán. En El Pitazo repasamos los datos clave para entender cómo llegaron a este punto las representaciones del oficialismo y la oposición.
El diálogo en México se convertirá este viernes en el tercero de los últimos intentos de negociación entre la oposición y el gobierno de Maduro, luego de que en 2018 las partes acudieran a República Dominicana y al año siguiente, en 2019, se vieran en Barbados, ambos procesos sin éxito alguno. En mayo de esta año, Guaidó anunció el llamado Acuerdo de Salvación Nacional, una proposición que pasa por la negociación con el gobierno de Maduro.
Jorge Rodríguez ha sido una de las figuras inamovibles del oficialismo, participante en los últimos procesos de negociación, y en esta ocasión se han sumado el gobernador de Miranda, Héctor Rodríguez, y el hijo de Maduro, quien es miembro del Parlamento electo en diciembre de 2020, Nicolás Maduro Guerra. Por la oposición, Gerardo Blyde, Tomás Guanipa y Stalin González, quien también ha estado en negociaciones anteriores, fueron los designados para participar en este nuevo intento.
Si bien las partes han dicho que el objetivo del diálogo y la negociación es lograr una solución a la crisis política, las delegaciones tienen agendas concretas: por una parte, el gobierno de Maduro planteó que entre los puntos en México estén el reconocimiento de Maduro como presidente electo, de la Asamblea Nacional que fue elegida en cuestionadas elecciones en diciembre de 2020 y el levantamiento de las sanciones internacionales.
La oposición planteará asuntos como las garantías necesarias para elecciones libres, verificables y justas, tanto presidenciales y parlamentarias como regionales y municipales; la entrada de ayuda humanitaria y la liberación de los presos políticos.
México y Noruega son los países que han auspiciado esta nueva ronda de negociaciones y diálogos. El país sede participó, junto con Uruguay, en la creación de una mesa de diálogo entre las partes en 2019, por lo que cuando Guaidó propuso el Acuerdo de Salvación Nacional, el país azteca fue uno de los elegidos entre las partes para el nuevo diálogo. Noruega será el garante del nuevo diálogo, esto luego de haber participado como facilitador en el proceso de 2019.
Asimismo, dos nuevos actores se han sumado en este nuevo intento de negociación: Rusia y Países Bajos, que apoyarán a las delegaciones de oposición y del oficialismo.
De acuerdo con lo que se ha informado hasta el momento está previsto que el proceso de diálogo y negociación se extienda hasta el próximo lunes. Las delegaciones de la oposición y el gobierno de Maduro firmarán un memorando de entendimiento, según lo precisado por el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, quien dio la bienvenida a los participantes que se verán las caras este viernes en el Museo Nacional de Antropología de México.
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