El obispo auxiliar de Caracas, monseñor Ricardo Barreto, se presentó el martes 20 de julio en la 77ª asamblea general de Fedecámaras para extender el mensaje sobre la crisis venezolana de Pietro Parolín, secretario de Estado del Vaticano.
Nicolás Maduro pidió el miércoles explicaciones al secretario de Estado del Vaticano sobre la carta que envió a la principal patronal del país, y que estaba cargada de «odio», según el gobernante.
En el texto leído por Barreto y publicado por Ricardo Cussano en Twitter el 21 de julio, se señalaba que «es importante que la sociedad civil sea también protagonista de la solución de la crisis actual» que se vive en Venezuela. También destacaba que «la solución solo se dará si los venezolanos y, especialmente, los que tienen algún tipo de responsabilidad política, están dispuestos a sentarse y negociar de un modo serio«, considera Parolín.
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“Esto exige voluntad política por los involucrados. Disponibilidad a dejar que el bien común prevalezca sobre los intereses particulares y el apoyo responsable de la sociedad civil y la comunidad internacional”, refería el mensaje.
Finalmente, el secretario de Estado vaticano aseguró en la carta que si una negociación tiene éxito, «será necesaria una gran generosidad y paciencia».
Tras la intervención de Barreto, Delcy Rodríguez, quien estuvo en la asamblea de Fedecámaras, dijo que “a la Iglesia le queda mucho trayecto de diálogo con las autoridades. Hugo Chávez decía que los curas que quieran hacer política que se quiten la sotana”.
Según Maduro, este mensaje es «una cosa rara» y puso en duda que la haya escrito. «No me consta que él la haya enviado, dicen que él envió una carta. Yo creo que no, que Pietro Parolín tiene mucho trabajo en Roma», indicó.
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