Caracas.- La actual situación migratoria se ha convertido en un riesgo para los venezolanos que están expuestos a redes de trata de personas que ven en ellos una oportunidad de explotación. Durante el forochat de El Pitazo de este miércoles 30 de julio, tres especialistas abordaron la compleja realidad de trata de personas que se vive en países donde los habitantes poseen alto nivel de vulnerabilidad.
Reina Baiz, directora ejecutiva de la organización Éxodo; Dorennys Angulo, abogada y gerente del programa contra la violencia de género de Hias Venezuela, y Estefanía Mendoza, abogada y coordinadora de la organización Mulier, explicaron todo lo referente a este delito.
La denominación «trata de blancas» está derogada por ser sexista, racista y discriminatoria. Baiz explicó que desde el año 2000 se utiliza la denominación «trata de personas» para referirse a un fenómeno tan antiguo como la humanidad. Asimismo, agregó que la Organización de las Naciones Unidas considera la trata de personas como una forma moderna de esclavitud, que se manifiesta de múltiples formas.
La directora ejecutiva de Éxodo explicó que se reconoce la trata de personas como una forma de esclavitud en la que se le arrebata su dignidad, autonomía e independencia y es degradada a la condición de objeto. “Es un delito complejo, continuado y es uno de los más invisibilizados por la alta cifra oculta, ya que la persona no suele denunciar por miedo a amenazas”, afirmó.
El reclutamiento y captación de personas, el traslado de la víctima, la acogida o recepción de la misma y la explotación son las etapas por la cual se presenta y se comete la trata de personas.
Baiz aclaró que en etapa de captación de personas es donde el tratante estudia a las potenciales víctimas y se le ofrece o somete su voluntad para así garantizan la explotación.
Por otra parte, la representante de Hias Venezuela explicó que la etapa de traslado de la víctima puede realizarse dentro del mismo país, como también a un destino externo. En este sentido, Angulo recalcó a los lectores de El Pitazo que una vez que la persona acepta la oferta sobre la mesa, el individuo es alejado con el fin de desarraigarlo de su círculo de amistades o grupo de apoyo para así lograr que la víctima genere una relación de dependencia con la red o con la persona que logró captarla hacia este delito.
Según Hias Venezuela, un indicador que ayuda a medir y a descubrir si el delito de trata de personas es comandado por un grupo estructurado es observando la distancia y longitud que fue trasladada la víctima. “Si migran a un sujeto a un lugar lejano, o que se requiere de una serie de documentos extensos, eso demuestra que existe más de una persona detrás del delito”, explicó Angulo.
Las panelistas aseveraron que para el tratante, las personas son vistas como simples mercancías. “No importan sus emociones y decisiones, sino la rentabilidad que se produce a través de las distintas formas de explotación. Por ello, de este delito se produce la violación del derecho humano, donde la persona es vista como un objeto”, afirmó la representante de Hias Venezuela.
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Para concluir la presentación e iniciar la ronda de preguntas por parte de los lectores de El Pitazo, Estefanía Mendoza, coordinadora de la organización Mulier, compartió cuáles son las formas y conductas más comunes de explotación de la trata de personas.
Un elemento de ello es principalmente la modalidad de explotación sexual, que en él se encuentra la acción de prostitución forzada, donde la víctima se ve manipulada y obligada a ejecutar actos sexuales para satisfacer a otras personas o generar beneficios económicos a terceros.
La generación de material pornográfico de niños, niñas y adolescentes, el trabajo forzoso o exigido bajo amenazas, la venta de niños y niñas y adopción ilegal, sometimiento de personas con discapacidad a la mendicidad, tráfico y venta ilegal de órganos y el matrimonio forzado, también forman parte de las conductas recurrentes para la explotación de la trata de personas.
Elizabeth Ostos desde Caracas pregunta «¿El gobierno de Maduro tiene alguna política de defensa de la trata humana de venezolanos?». Estefanía Mendoza, coordinadora de la organización Mulier, aclaró que las iniciativas por parte del gobierno han sido sumamente limitadas. A pesar de ello, comentó que el año pasado, el Ejecutivo creó una Fiscalía especial para combatir la trata de mujeres; sin embargo, se ha obtenido escasos reportes de la eficacia de este organismo.
Mendoza afirmó: “La gente puede denunciar la trata como se denuncia cualquier otro delito, el problema radica en la situación de impunidad que se vive en Venezuela, aunado a la carencia de respuesta por parte de los organismos del estado, pues todo queda en el aire”. Además, recalcó que si no se generan cifras oficiales por parte del gobierno es complicado generar políticas públicas para obtener respuesta a esta situación que en el país va en aumento.
Las panelistas aclararon distintas inquietudes de los lectores de El Pitazo, en donde recalcaron que la trata de personas prospera, porque los tratantes buscan operar en países donde existen situaciones que colocan a los habitantes en un alto nivel de vulnerabilidad. “Los tratantes ven en los venezolanos una gran oportunidad de explotación”, afirmó Mendoza.
Tibisay Ascención pregunta «¿En qué se asemeja la trata de personas con otros delitos?». Reina Baiz explicó que la trata de personas puede llegar a ser confundido con el tráfico ilícito de migrantes. Por ello es importante destacar que la trata de personas consiste en la captación, transporte, acogida o recepción con fines de explotación de la persona. En cambio, el tráfico ilícito de migrantes es la facilitación de la entrada ilegal de una persona a un estado, de la cual dicha persona no es nacional o residente permanente. Es el paso de fronteras sin haber cumplido los requisitos necesarios para la entrada legal en el estado receptor.
Para concluir el forochat, la abogada Angulo sugirió a los lectores de El Pitazo que para combatir la trata, principalmente, deben entender y tener en cuenta que existe ese riesgo y, segundo, estar consciente de que cualquier persona que se encuentre en un estado de vulnerabilidad puede ser víctima ante este delito.
Por: Stephany Armas
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