Habitantes de El Morro protestaron este martes 19 de mayo, exigiendo agua, venta de cajas Clap y electricidad | Foto: Cortesía habitantes de Arismendi
Carúpano.- Vecinos de Río Caribe y El Morro, comunidades del municipio Arismendi, estado Sucre; reportaron fallas en los servicios eléctrico y telefónico desde hace dos meses, aproximadamente. Además, los habitantes aseguraron, este 19 de mayo, que desde que se inició la cuarentena decretada por el gobierno de Nicolás Maduro, para prevenir la propagación del COVID-19, aumentaron la escasez de agua, de gasolina, las fallas en las líneas telefónicas y el precio en dólares de los productos.
Los ciudadanos explican que la electricidad se asemeja a las luces de un arbolito de Navidad por las constantes fluctuaciones. “El domingo diecisiete de mayo estuvimos sin electricidad desde las cinco de la tarde hasta las seis de la tarde del día siguiente. Estuvimos veinticuatro horas sin el servicio eléctrico, tomando en cuenta que cuando no hay electricidad quedamos sin servicio telefónico y tampoco funcionan los puntos de ventas”, refirió Rafael García, habitante de la zona pesquera.
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Los arismendinos también detallan que los precios de los productos aumentaron en 200 % durante la cuarentena y que la falta de combustible hace que los ciudadanos carezcan del pescado en sus hogares. “Los pescadores estamos sin alimentos, porque cuando llega el combustible nos dan noventa litros de gasolina, que no alcanzan para una semana de labores de pesca. Esto disminuye la cantidad de pescado en el pueblo y los alimentos en la mesa de los trabajadores del mar”, aclaró Manuel Cayetano, vocero de los pescadores en Río Caribe, este 20 de mayo.
Debido a las deficiencias que persisten en este municipio, el martes 19 de mayo, habitantes de El Morro cerraron el acceso a su comunidad con palos y piedras hasta prolongadas horas de la tarde, exigiendo al alcalde del municipio Arismendi, José Villarroel, la venta de alimentos de las cajas de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (Clap), así como el agua y el arreglo de las líneas telefónicas, ya que alegan que la señal Movistar tiene 15 días dañada. Afirman que la falta de electricidad los mantiene incomunicados.
Entre las carencias que denuncian los habitantes de Río Caribe está la falta de suministros en el Hospital Dr. Pedro Rafael Figallo, donde reportan que no hay medicamentos ni alimentos para los pacientes. “Algunos empresarios, las damas voluntarias y los habitantes ayudan a cubrir algunas carencias con donativos, que van desde los desinfectantes, los alimentos hasta los suministros médicos, pero todo eso se queda corto con las necesidades del centro asistencial”, añadió Jhon Valencia, líder comunitario de Río Caribe.
Valencia expone que tienen 15 días esperando que las autoridades faciliten un medio de transporte para que busquen en Casanay, municipio Andrés Eloy Blanco, un donativo de alcohol para uso hospitalario realizado al hospital por el laboratorio químico de Casanay y no tienen respuesta. “Es el momento de ayudar y extender la mano al más necesitado”, enfatizó.
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