Barcelona.- “Tenemos más de dos años pidiendo a gritos que ajusten nuestros salarios y hasta ahora no hemos recibido respuestas. Este sistema está asfixiando a los trabajadores del sector Salud, a tal punto que muchos se han visto en la obligación de abandonar sus puestos de trabajo.
Son palabras del delegado de prevención del Hospital Luis Razetti de Barcelona, Edison Hernández, quien lideró el pancartazo que se inició la mañana de este miércoles en la entrada del hospital Luis Razetti de Barcelona. La acción de protesta fue en respaldo a la convocatoria nacional realizada por el Colegio de Enfermeras, a la cual se sumaron los trabajadores del sector salud del estado Anzoátegui, quienes exigieron salarios en divisas y mejores condiciones laborales.
“Somos los esclavos del sigo XXI y vivimos en peores condiciones, pues a los primeros esclavos les garantizaban la alimentación; hoy en día no tenemos ni cómo trasladarnos a nuestros puestos de trabajo”.
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Los manifestantes denunciaron las precarias condiciones bajo las cuales laboran y citaron como ejemplo el estado en el que se encuentran los dormitorios del Hospital Luis Razetti, donde aseguran que los roedores se han apoderado de la zona y que los colchones no están en condiciones aptas para descansar en ellos.
Explicaron que los trabajadores del sector salud cobran un monto menor al salario mínimo y ello ha repercutido en el desmejoramiento de la calidad, lo que a su vez ha traído como consecuencia la renuncia de más de mil empleados en el estado Anzoátegui.
“Ya estamos cansados de pedir y pedir y no ser escuchados. Queremos respuesta inmediata y el pago de salarios en dólares y en montos justos, pues este sistema sabe las carencias que tiene el sector y lo indispensable que resulta contar con un personal apto”.
Los empleados iniciaron la protesta pasadas las 7:00 am de este miércoles en la entrada principal del Hospital Luis Razetti de Barcelona y desde allí se movilizaron, tres horas más tarde, hasta el hospital Domingo Guzmán Lander, de Las Garzas, donde se sumaron a otros 200 empleados del sector salud que se habían unido al paro nacional.
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