Maturín.- En Maturín solo se permitió, este 10 de agosto, el despacho de 30 litros de gasolina por conductor. A través de contactos telefónicos, algunos usuarios explicaron a El Pitazo que no todas las estaciones de servicio habilitadas abrieron desde las 7:00 am y que no les informaron a qué se debió el retraso porque, supuestamente, todas fueron surtidas la noche del 9.
Para este lunes, el gobierno regional habilitó solo 10 de las 26 gasolineras en la capital de Monagas, una decisión que también causó malestar entre los usuarios porque las colas son más largas y no todos tienen la oportunidad de llenar el tanque de su vehículo. “Esto es un abuso, es un atentado en contra del pueblo que necesita gasolina para resolver sus pendientes durante los días de flexibilización”, dijo Michelle Salas, una usuaria que hacía cola en la avenida Alirio Ugarte Pelayo, zona norte.
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Salas denunció que en todas las bombas de la ciudad se da prioridad a las colas paralelas y no a quienes hacen fila respetando el orden de llegada de las demás personas. Esta comerciante de 33 años de edad especificó que en la estación de servicio Manantial, en Tipuro, los funcionarios de seguridad cobran entre 10 y 30 dólares por dejar pasar a los conductores sin hacer cola. “Uno denuncia y las autoridades gubernamentales no solucionan”, enfatizó.
El reporte de los conductores también indica que por cada gasolinera hay hasta 600 carros y solo marcan a 300. Fue el caso de Luis Ruiz, un conductor particular que estaba en una bomba habilitada en la avenida Libertador donde atendieron a esa cantidad de vehículos. Ruiz expresó su malestar porque ahora debe esperar otros 15 días para intentar llenar el tanque de su automóvil, pues durante la cuarentena obligatoria no hay distribución para todos.
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La ausencia de gasolina en el estado causó una protesta de conductores en Temblador, municipio Libertador, en la zona sur. Los usuarios trancaron la avenida principal y atravesaron cauchos para impedir el paso vehicular; denunciaron que están cansados de esperar el despacho sin que sean atendidos.
La venta de gasolina en Monagas se reanuda luego de que la gobernadora Yelitze Santaella dijo el 7 de agosto que no había combustible para atender a toda la población y que por eso cerraría las estaciones de servicio al público sin dejar a surtir a los sectores prioritarios. Ese día, Santaella también alegó que la medida obedecía a que las gasolineras son un foco de infección del coronavirus en las que varios de sus funcionarios se habían contagiado.
