Privados de libertad de Nueva Esparta son recluidos en calabozos policiales y superan la capacidad de los espacios con u a sobrepoblación de 315%. Foto: Archivo referencial
La Organización no Gubernamental (ONG) Una Ventana a la Libertad realizó un monitoreo durante los cuatro primeros meses de 2021 para conocer la situación de hacinamiento de reclusos y de la violación de los derechos humanos en los centros de detención preventiva de Nueva Esparta.
De acuerdo con el informe final, publicado la segunda semana del mes de mayo, en la entidad insular existe una sobrepoblación de al menos el 315%, dijo Carlos Alberto Nieto Palma, coordinador de la ONG Una Ventana a la Libertad, a través de una entrevista vía telefónica con El Pitazo realizada el jueves 27 de mayo.
Nieto detalló que monitorearon 24 calabozos policiales y entre todos tienen una capacidad para 527 detenidos, sin embargo, detectaron que al momento de realizar la investigación tenían un total de 1.661 privados de libertad, lo que significa que existe un hacinamiento que supera el 300%.
LEE TAMBIÉN
HACINAMIENTO Y PANDEMIA: LA PESADILLA DE LAS CÁRCELES EN AMÉRICA LATINA
El coordinador de la ONG Una Ventana a la Libertad recordó que Nueva Esparta es el único estado de Venezuela que actualmente no cuenta con cárcel como tal, ya que el internado judicial de San Antonio, en la isla de Margarita, fue cerrado en febrero del año 2016, y aún no ha sido reabierto, lo que obliga a llevar a todos los detenidos a esos centros de reclusión preventiva.
“La cárcel como tal no se le ha dado reapertura, apenas hay un pequeño número de reclusos allí adentro, pero no se le está dando una función de cárcel como tal y como debería ser. Entonces todos los presos del estado Nueva Esparta tienen que ir a centros de detención preventivos porque no hay otro lugar donde llevarlos”, contó Carlos Nieto.
El representante de la ONG aseguró que de acuerdo con las investigaciones realizadas en lo que va de año, en los centros preventivos de otros estados del país reina un hacinamiento de 350%, además de otros problemas graves como falta de alimentación, y el fallecimiento de reclusos. “Entre octubre de 2020 y abril de este año, 82 privados de libertad murieron por diferentes causas, de esos 24 por tuberculosis, tres por VIH y dos por problemas respiratorios”, explicó.
LEE TAMBIÉN
COJEDES | FAMILIARES DE PRESOS DENUNCIAN HACINAMIENTO EN EL CICPC DE SAN CARLOS
Esta web usa cookies.