Margarita. Bajo un sol radiante se celebró la misa de la solemnidad por los 108 años de la coronación canónica de la Virgen del Valle, patrona de Oriente, de los pescadores y de la Armada Venezolana. La sagrada imagen de la madre de Dios lució un vestido donado por los miembros de este último cuerpo institucional y la corona recuperada por quienes se buscan la vida en el mar, los propios pescadores.
Durante la homilía, celebrada este domingo, 8 de septiembre, el obispo de la Diócesis de Margarita, monseñor Fernando Castro Aguayo, destacó la adversidad económica que enfrenta Venezuela y pidió por los más necesitados. “La Virgen María, madre de Jesucristo, es un misterio de consuelo y esperanza. La madre de Dios quiere que todos los niños sean ungidos y protegidos por Jesucristo y por ella”, indicó el obispo.
La autoridad eclesiástica también expresó preocupación por el alto costo de la vida en el país. Imploró por los gobernantes, para que estén menos pendientes de la propaganda y la figuración en vez de ocuparse de cumplir con las promesas de estabilizar la economía. “Desde enero hasta hoy la moneda vale 10 veces menos; es decir, que lo que en enero era 90, hoy es 9. Todo es inaccesible”, remarcó el obispo de Margarita.
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Monseñor Fernando Castro Aguayo además expresó solidaridad con los familiares de los presos políticos en Venezuela, especialmente con los que han muerto víctimas de las torturas en los calabazos de los servicios de inteligencia del gobierno de Nicolás Maduro.
“Un recuerdo muy especial para Fernando Albán y su familia; para la del capitán de Fragata Acosta Arévalo y para todos aquellos cuyos nombres desconozco, pero que representan a los héroes anónimos, quienes, junto con sus familias, solo el Señor y su santísima madre conocen”, expresó Castro Aguayo.
Igualmente lamentó que muchos niños se desmayen en las escuelas por falta de alimentación y también oró por los que no tienen medicinas y los que se han ido del país en busca de mejores condiciones de vida.
Fervor por la Virgen marinera
Aunque esta fecha se vive con mayor fervor en el Oriente de Venezuela por ser la Virgen del Valle su patrona, ya esta adveración de María ha transcendido las fronteras por agradecimiento a los favores concedidos. El devoto Pablo Emilio Medina, con su Virgen al lado, expresó que cada año hace el esfuerzo por asistir a las festividades. “Esta imagen de la Virgen del Valle la tengo desde hace diez años para pagar la promesa aquí todos los años. Ella me hizo un milagro cuando yo estaba hospitalizado y me sacó de ese hospital cuando estaba tan grave que ya no podía más con mi vida. Le pedí y la invoque y al otro día empecé a sentirme mejor”, aseguró.
Las autoridades municipales y regionales acompañaron los actos religiosos. El gobernador de Nueva Esparta, Alfredo Díaz, imploró a la Virgen marinera protección para todos los venezolanos. “Hay que pedirle a nuestra madre que nos ilumine y que encamine a este pueblo por el progreso y el bienestar que todos anhelamos”, afirmó.
