Desde hace tres años la ausencia de la vacuna antineumococo o anti rotavirus e influenza, las cuales previenen algunas enfermedades y complicaciones de otras, ha traído como consecuencia alto índice de personas enfermas en la entidad insular.
Según se pudo conocer, el programa ha venido en un descenso de casi 90% en los últimos tres años.
El personal calificado y encargado de recibir las vacunas en el ambulatorio María Marval del municipio Tubores, quienes prefirieron mantenerse en anonimato para evitar represalias en su contra, manifestaron su preocupación al respecto. Una cantidad considerables de niños y niñas de la comunidad no han recibido sus refuerzos debido a la ausencia de las vacunas. Tienen conocimiento que esto ocurre en todo el estado. Colocarlas de manera privada tienen un costo aproximado entre 100 y 120 dólares.
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El doctor German Rojas, secretario de la Sociedad Venezolana de Puericultura y Pediatría (Svpp), manifestó que la falta de vacunas mantiene en vilo la salud de los margariteños; al igual que la incidencia de neumonía y meningitis se desconoce por la falta de vacunas y la problemática en la determinación virología y envío de muestras al instituto Rafael Rangel.
De igual manera destacó que en la entidad hay un brote importante de enfermedades respiratorias y aumento de hepatitis A. Dejó saber que muchos aspectos afectan, pero la vacunación engrosa la cifra de ausencias en el país.
Por Karina Vásquez.
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