El Tigre.- Comprar cilindros de gas se ha vuelto una hazaña para gran parte de los habitantes de El Tigre, en el sur de Anzoátegui, donde las colas en las afueras de la planta de llenado de Pdv Gas Comunal son extensas y la mayoría de las veces los usuarios se regresan a sus casas sin comprar la bombona.
Las fallas en la distribución y recarga de los cilindros es una de las principales causas del déficit debido a que al municipio solo llega una cisterna con gas. Aunque no hay un pronunciamiento oficial por parte de las autoridades, una de las razones de que solo esté operando una cisterna es que las demás están paradas por falta de cauchos y mantenimiento.
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Estas dificultades no le dejan otra opción a los residentes que cocinar con leña o comprar con sobreprecio las bombonas. A esta última alternativa ha tenido que acceder Xiomelis Rodón, residente del sector 25 de Mayo, quien asegura que comprar los cilindros en la planta se le ha hecho cuesta arriba. “He tenido que pasar dos días continuos llevando sol y calándome una larga cola, sin poder salir, porque venden muy pocas bombonas y casi todas se las llevan los revendedores”, afirmó.
El presidente de la Comisión de Servicios de la Cámara Municipal de Simón Rodríguez, Alejandro Fuentes, señaló que para contrarrestar estas dificultades realizan los operativos en los sectores. Alegó que estas jornadas se mantienen semanalmente en las diversas comunidades. “Se está haciendo un esfuerzo, porque sabemos que hay fallas en la distribución y los vecinos necesitan el gas para cocinar. Por eso queremos acabar con los bachaqueros que se están aprovechando de la situación”, explicó.
Roger Zambrano, habitante del sector José Antonio Anzoátegui, dijo que pasó dos semanas tratando de comprar gas doméstico en las afueras de la planta de Pdv Gas Comunal y no pudo. “Cómo uno puede comprar con la mafia que tienen allí?, uno hace la cola desde la madrugada, pero cuando comienzan a vender no ofrecen más de 100 bombonas. Cuando se inicia la venta hay 30 personas por delante con 10 bombonas cada uno y se las venden, porque ellos pagan más o van y las revenden y les dan comisión a los trabajadores de la planta. No encuentro otra lógica”, apuntó.
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Los ajustes
Aunque en los últimos seis meses el precio del cilindro de gas ha subido, las fallas continúan. En el mes de septiembre, el cilindro de 10 kilogramos aumentó a 5.000 bolívares; la de 18 kilogramos, a 9.000 bolívares, y la de 43 kg, a 21.000.
Luego, a partir del 16 de diciembre, realizaron un ajuste y los precios se elevaron a 10.000 bolívares (10 kgr), 18.000 (18 kg) y 43.000 bolívares (43kg). El último ajuste se concretó el 3 de febrero, cuando las bombonas pasaron a costar 15.000 bolívares (10 kg), 27.000 (18 kg) y 64.500 bolívares (43kg).
Según algunos usuarios, como Rafael Alfonzo, el ajuste tarifario lleva a que los revendedores aumenten más los costos, pues hasta 200.000 bolívares cobran por un cilindro mediano y 600.000 por un cilindro grande. “Por una bombona pequeña me tocó pagar 110.000 bolívares en efectivo, porque ya tenía muchos días sin gas y estaba haciendo cola en vano. Mientras no resuelvan este problema, la situación va a seguir”, acotó.
Una persona puede pasar hasta ocho horas en cola por una bombona y retornar a su vivienda con el cilindro vacío porque no logra comprar debido a la poca cantidad que despachan en la planta o por la situación con los revendedores.
Para algunos, los operativos en los sectores no funcionan. Gladys Cedeño, residente del sector Pueblo Nuevo Sur, alegó que hasta el momento no han realizado ningún operativo y ni siquiera sabe dónde están los encargados del consejo comunal. “Me ha tocado cocinar en leña porque las dos bombonas medianas que tengo se me acabaron y no logro comprar. No sé dónde hacen esas jornadas, pero me gustaría ir a ver si funcionan”, expresó.
El pasado viernes 28 de febrero, la Guardia Nacional realizó un operativo y decomisó varias bombonas que eran revendidas a precios que oscilaban entre los 100.000 y 200.000 bolívares.
