Barcelona.- El defensor de los Derechos Humanos en el estado Anzoátegui, José Santoyo, denunció este jueves, 26 de marzo, que los pacientes renales no pueden asistir a los centros de diálisis por falta de combustible, por lo que exhortó a las autoridades a entregarles salvoconducto para garantizar sus vidas.
“Las autoridades deben establecer un plan especial de suministro de combustible destinado a quienes necesariamente tienen que ir a los centros de hemodiálisis. Dentro del plan es fundamental incluir a los pacientes con cáncer que están bajo tratamiento de quimioterapia o radioterapia, así como también a las mujeres que se encuentren en proceso de parto. Es un asunto de vida o muerte”, advirtió Santoyo en declaraciones a El Pitazo.
Para el jurista es indispensable atender esta emergencia lo antes posible e informó que pudo conversar con Marilet Rodríguez, quien es familiar de uno de los pacientes renales y esta le indicó que la última vez que trasladó a su padre al centro de diálisis en transporte público él se descompensó.
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“Muchos pacientes renales tienen catéteres o fístulas arteriovenosas, y la movilización en transporte público sería de alto riesgo, porque están expuestos a contaminarse. Además, por su precaria condición de salud, estas personas poseen un sistema inmunológico muy debilitado, con lo cual son susceptibles a contagiarse con el COVID-19”, resaltó el defensor de los Derechos Humanos.
Gasolina limitada
A propósito de ello, el director ejecutivo de la Federación Unitaria de Trabajadores Petroleros de Venezuela (FUTPV), Eudis Girot, aseguró que las limitaciones en la distribución de combustible se debe a que a Venezuela no han llegado buques desde hace tres semanas.
“Queda combustible para 15 días porque están trabajando con la poca reserva disponible, recuerden que las plantas, específicamente la Refinería de Puerto La Cruz, donde se debería producir el combustible, está parada hace dos años y en todo el país ocurre lo mismo”, resaltó Girot.
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El representante sindical aseguró que así entreguen salvoconducto a los ciudadanos llegará el momento en el que no habrá gasolina para nadie, pues informó que a la escasez se le suman las medidas sanitarias nacionales e internacionales debido a las prevenciones que se están tomando para evitar contagios del COVID-19, lo que impiden el desplazamiento y acentúa la escasez.
En la zona norte del estado Anzoátegui las autoridades han indicado que los vehículos oficiales, del sector salud, telecomunicaciones y demás entes autorizados puedan surtir en las cuatro estaciones habilitadas, pero algunos de los que han acudido a las bombas denuncian que están dando prioridad a los efectivos de la Guardia Nacional.
