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EL PODER EN ESTE PAÍS
Por: Rogelio Guevara Cantillo
La escasez de combustibles continua en el país y no se ven señales de mejora, al menos para este año 2021, mientras la producción de hidrocarburos sigue mermada. Petróleos de Venezuela, por su parte, desea reactivar las inversiones en el sector gas. La idea es desarrollar cerca de 14 campos, apoyados en el otorgamiento de licencias de acuerdo a la Ley Orgánica de Hidrocarburos Gaseosos, proyectos que necesitan cerca de 9,7 millardos de dólares para ser levantados por privados nacionales y extranjeros en su mayoría ubicados en el oriente del país. ¿Se podrán materializar estas inversiones? ¿Qué porcentaje de venezolanos y foráneos querrán arriesgarse? ¿Los inversionistas no recibirán sanciones por parte de la Casa Blanca?
La petrolera estatal venezolana está utilizando cada vez más su limitada producción de crudos medianos y livianos para refinación, lo que resulta en escasez de material para formular mezclas exportables, hecho que afectará el flujo de caja de la empresa tarde o temprano. Petróleos de Venezuela suele utilizar la mayor parte de la producción de los crudos más ligeros del país para destinarlos en operaciones de mezcla con la Faja del Orinoco, uno de los yacimientos más grandes del planeta. La escasez de gasolina y diésel ya es crónica en el país y para tratar de obtener un paliativo, se tiene que utilizar el petróleo liviano y mediano para obtener algo de combustible para motos, vehículos, gandolas, entre otros. Una caída en el ya maltrecho sistema de envíos de crudo al mercado internacional sería un duro golpe a las finanzas del régimen de Nicolás Maduro.
Los principales destinos de la hoy exigua exportación petrolera venezolana son China, Malasia y los Emiratos Árabes Unidos. ¿A qué bancos están llegando estos ingresos por ventas? Se estima que Petróleos de Venezuela está produciendo solo 700.000 barriles por día. La empresa petrolera no publica información financiera desde el año 2016 y se puede evidenciar consultando en su página web. Los centros de refinación en Venezuela como Amuay, El Palito y Puerto La Cruz continúan en bajos niveles de operaciones y para agravar la oferta local, continúan zarpando de costas venezolanas tanqueros cubanos como el Petion, Esperanza o Maria Cristina, por citar algunos con combustible y/o petróleo rumbo a la isla del Caribe.
Esta ha sido otra alternativa para mejorar la producción nacional de combustibles, pero ¿son viables las “minirefinerías”? Una propuesta hecha por el sector empresarial privado y liderada por Fedecámaras espera que Nicolás Maduro permita la creación de “minicentros refinadores”. Pero, ¿es esto posible operativamente? ¿Cuál sería la inversión promedio? ¿En cuánto tiempo podrían construirse? ¿Se respetará legalmente esta inversión a futuro por parte de Miraflores o un gobierno interino? ¿A quiénes se les dará el permiso para poder operar? En declaraciones de días pasados, el experto en petróleo Rafael Quiroz Serrano aseguraba que los recursos necesarios para este tipo de proyectos podrían variar dependiendo de variables como la distancia entre la planta refinadora y el yacimiento de petróleo en cuestión. Al ser pequeños centros de refinación, la capacidad de procesamiento por día debe ser menor, estimándose entre 5.000 a 25.000 barriles en cifras conservadoras. La solución real y estratégica sigue siendo recuperar la gran industria refinadora del país, que en el pasado fue orgullo nacional, pero esto no se logra de la noche a la mañana.
La escasez de gasolina continúa en Venezuela y seguirá siendo un punto constante para este año 2021. La solución a la vista es comenzar con un plan paulatino de privatización de estaciones de servicio, como se puede observar hoy en día en algunos puntos del país y sincerar precios reales de la gasolina, cosa que ya se ha venido realizando, sin crear malestar en la población. La producción nacional es débil y ha aumentado el racionamiento del diésel. Muchos son los llamados diarios del gremio productor del campo para solucionar esta situación. El presidente de Fedeagro, Aquiles Hopkins, ha realizado llamados y reflexiones constantemente. “Todos los rubros están en riesgo si no se soluciona este problema antes de comenzar la siembra de invierno, que es la más importante del año para el país”, opina. Se ha llegado a realizar la propuesta de importación privada de diésel para garantizar los alimentos en las ciudades de Venezuela.
Las cosechas no se han podido recolectar y trasladar debido a esta variable adversa. Un ejemplo son los casos del maíz, caña de azúcar, cacao y legumbres desde los estados productores, por solo citar algunos casos. Nicolás Maduro utilizaba el intercambio de diésel para cubrir el déficit que existe en la producción nacional y esto se vio truncado en octubre del año pasado por las sanciones de la Casa Blanca al régimen socialista. Petróleos de Venezuela en esta variable, así como otras, esgrime una total opacidad sobre las cifras de producción y de distribución de este preciado combustible. Al parecer los venezolanos continuaremos sorteando la tempestad de la falta de combustibles en un país que irónicamente nada en petróleo.
ROGELIO GUEVARA CANTILLO | @Rogeliogcmundo
Analista del poder y economía en Latinoamérica.
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