Contratos inteligentes para blockchain en Venezuela

EL PODER EN ESTE PAÍS

Por: Rogelio Guevara Cantillo

Las criptomonedas siguen fascinando los mercados de valores a nivel global, en especial, llama la atención los aspectos legales detrás de esta nueva forma de dinero. Sobre este tema conversé con Daniel Badell, profesor y abogado egresado de la Universidad Católica Andres Bello (Ucab) y máster en Derecho de los Mercados Internacionales en Bournemouth University, Inglaterra; especialista en Ciencias Penales y Criminológicas, así como socio en el despacho de abogados Badell & Grau en Caracas. 

El profesor Badell explica que la tecnología blockchain o también llamada “cadena de bloques” es una base de datos segura, compartida y distribuida, la cual funciona como un “libro mayor” público que lleva el récord de todas las transacciones o eventos digitales que han sido realizados por las partes involucradas. Es como una contabilidad de todas las operaciones.

Al ser una base de datos, solo se permite añadir transacciones que no pueden ser borradas debido a que el registro es inmutable, permitiendo así su trazabilidad, uno de los factores más importantes de esta tecnología. “Se dice que es una base de datos compartida porque todos los que tengan el software también son dueños de la información; descentralizada porque no hay intermediarios; y segura gracias al uso de la criptografía”, añade el experto Badell.

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La tecnología avanza muy rápido y en el tema de las criptomonedas aún más. Pero, ¿qué es un contrato inteligente? Un contrato inteligente es un tipo de acuerdo basado en instrucciones que se almacenan en la blockchain, que tiene la capacidad de ejecutarse de manera automática siempre que se cumplan los parámetros ya programados, explica Badell.

A diferencia de los contratos en papel escritos en lenguaje natural, los contratos informáticos son un tipo de software, escritos en código virtual, que se programa para llevar a cabo determinadas tareas. Por lo tanto, su cumplimiento no está sujeto a la interpretación de ninguna de las partes, punto de relevancia que enfatiza Badell.

Este tipo de contratos tienen su génesis en 1993, cuando el criptógrafo estadounidense Nick Szabo comenzó a utilizar el término de contratos inteligentes. Szabo propuso el cambio de los contratos tradicionales a este sistema, pero no tuvo éxito debido a las limitaciones tecnológicas de ese momento. Daniel Badell considera que gracias a la aparición de Bitcoin cambió esta situación, pues fue el primer proyecto en hacer uso de la tecnología blockchain, la cual es la que permite la operatividad de los contratos inteligentes que se hicieron una realidad con la creación de otra criptomoneda, en este caso Ethereum en 2014.

En el ámbito legal, explica Daniel Badell, Venezuela ha emitido regulaciones para las criptomonedas y es la Superintendencia de Criptoactivos y actividades conexas (Sunacrip) la encargada de su control y supervisión. En ese sentido, hay una obligación de registrar a todas las personas y empresas que realicen actividades relacionadas a los criptoactivos, así como los Exchange requieren de licencias para operar.

El profesor Badell explica que la tecnología blockchain o también llamada “cadena de bloques” es una base de datos segura, compartida y distribuida, la cual funciona como un “libro mayor” público que lleva el récord de todas las transacciones

¿Cómo este tipo de contratos cambiará la industria de las finanzas y la banca en Venezuela? En las ideas de Daniel Badell, el mundo de los contratos inteligentes está dirigido a cambiar el sistema legal más que de las finanzas, por las múltiples aplicaciones que pueden tener este tipo contratos en distintos sectores como el de la salud, mercantil y en definitiva todos aquellos que requieran de la aplicación de un contrato de por medio.

En todos los casos se puede sustituir el contrato escrito por un contrato inteligente en donde, tal como se explicó, las cláusulas se van ejecutando en la medida que se cumplen determinados parámetros sin que haya interpretación de las partes. Respecto a la banca, este sector seguirá existiendo y operando como lo conocemos, solo que podrían brindar servicios relacionados a las criptomonedas como la custodia de valores en criptos, que ya es una realidad en varios países.

Sin embargo, llama la atención Badell que la evolución más importante que representan las criptomonedas es la posibilidad de que la población mundial, que en la actualidad menos del 70% tiene acceso a la banca formal, pueda adquirir activos digitales transferibles sin intermediación de terceros, lo que les dará poder económico a más personas de lo que ha logrado el sistema bancario tradicional.

El profesor Badell y yo consideramos que el uso actual de la tecnología Blockchain es comparable a los inicios del internet. Cuando surgió internet enviábamos correos electrónicos y eso nos dejaba maravillados, pero no nos imaginamos todo lo que vendría después como es la evolución de la telefonía móvil, mensajería instantánea digital, sistema de almacenamiento en nube para música, datos, correos y más. 

Se digitalizó el mundo del vídeo, surgieron empresas como Netflix acabando con Blockbuster, y así una serie de cambios conforme evolucionó el uso del internet dando paso a múltiples aplicaciones. Hoy en día las personas hacen uso diario del Global Positioning System (GPS). Internet fue una disrupción que comenzó a crecer y luego vinieron múltiples aplicaciones de esta tecnología a todo. Por ello, considerando que estamos en los primeros años de adopción de la tecnología blockchain, no queda duda de que las aplicaciones en el futuro serán grandiosas.

ROGELIO GUEVARA CANTILLO | @Rogeliogcmundo

Analista del poder y economía en Latinoamérica.