Las fallas en la planta de ósmosis de la Unidad de Diálisis Barquisimeto lleva más de seis meses, sin embargo, desde hace 15 días el problema se acentuó y a partir del sábado 1 de junio el tratamiento para 200 enfermos renales fue suspendido hasta tanto el técnico repare el daño.
“Eso tiene mucho tiempo dañado. Pasa que programan las máquinas para tres horas de diálisis y cuando las enfermeras revisan, el tiempo efectivo es de dos horas, cuando la norma es de cuatro horas por paciente, aquí y en la conchinchina, así sean máquinas de alto flujo”, explicó la paciente Yadira Torrealba.
Han llamado al único técnico que trabaja para la zona centroccidental y no ha asistido al centro de salud, donde muchos pacientes tienen hemoglobina menor a seis y sus vidas corren peligro.
“A estos pacientes no se les puede colocar la diálisis con un flujo rápido, porque tienen riesgo de infarto. Con ese flujo se acumulan las toxinas: urea, creatinina…”, agregó Carmen Padilla.
LEE TAMBIÉN:PACIENTES RENALES PROTESTARON POR FALTA DE DIÁLISIS EN GUÁRICO
A esta dificultad, se le suma la escasez de medicamentos que deben tomar o la carestía de los mismos. Los principales son ácido fólico, complejo B, hierro, eritropoyetina, calcio, proteínas como enterex, proteinex, entre otros que se les hace imposible costear cada mes.
La dieta que deben cumplir los enfermos renales se les hace cuesta arriba, porque debería estar enfocada en proteínas como pollo y pescado, comida que no prueban porque no tienen posibilidad de adquirirla. “Comemos lo que hay, el pollo tengo meses sin probarlo”, expresó Edixon Díaz.
Baño sucio y cloaca desbordada
Los enfermos renales, tienen la hemoglobina y defensas bajas, lo que los hace susceptibles de adquirir cualquier infección con más facilidad, sin embargo, esto no es considerado por las autoridades sanitarias, porque no han atendido el reclamo por la cloaca desbordada en la entrada, ni mantienen una limpieza acorde con un centro de salud.
De continuar la situación con la planta de ósmosis, los enfermos renales seguirán protestando, porque como han dicho, es su vida la que está en peligro.
Aún sin fuerzas saldrán a la calle, acompañados de sus familiares y amigos, para reclamar el derecho a la salud y la vida.
