Maracaibo.- Mujeres, niños y hombres revenden gasolina en la Troncal del Caribe, vía que comunica al estado Zulia con Colombia, hay kilómetros de carretera donde ofertan envases de varios tamaños con combustible a los conductores, pese a la escasez que hay en la región.
Mientras los conductores se acercan a Maicao, municipio de la guajira colombiana, la venta ilegal crece y el precio de las pimpinas varía. Aunque en Maracaibo y municipios de la Costa Oriental del Lago, las colas en las estaciones de servicio son kilométricas y tardan hasta tres días para surtir, hay más de 100 ventas ilegales en la vía que la venden en pimpinas.
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Después de Bomba Caribe, un terminal improvisado de pasajeros con destino a Colombia, situado en la carretera Maracaibo-El Moján, comienzan a ofertar la gasolina y la situación se repite hasta llegar a Paraguachón.
Maicao está a 120 kilómetros de Maracaibo y menos de tres horas de distancia, aunque en el Zulia, su gente sufre para poder surtir sus vehículos de gasolina, en la troncal hay ventas ilegales que la ofrecen hasta en 90.000 bolívares en efectivo, también reciben pesos y dólares.
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En un cartel de cartón, los vendedores agitan el precio para los conductores. En algunos dicen 65.000, 75.000 y hasta 95.000, dependiendo del tramo de la vía, el precio es dinámico y se ajusta a las necesidades de los conductores, ya que venden cinco, diez y hasta 50 litros.
José, como se identificó uno de los vendedores de la vía, explicó que en camiones se movilizan a otros municipios o hacen cola en las estaciones de servicio de Mara y Guajira para surtir, aunque en la zona el despacho de gasolina puede tardar hasta siete días en llegar en alguna de las tres estaciones operativas.
En Guajira, muchos de sus habitantes viven de la venta ilegal de gasolina que se mantiene escasa en otras zonas de Zulia. Aunque las autoridades zulianas aseguran que mantienen un operativo para controlar el contrabando de combustible, las ventas ilegales continúan.
