Vecinos de la calle 10 con esquina 17 de la urbanización Santa María en Coro, denunciaron este 3 de abril, a través de las redes sociales, un foco de aguas servidas que han soportado desde hace ocho meses y amenaza con enfermar a integrantes de 15 familias que permanecen en sus casas debido a la cuarentena por el COVID-19.
Walter Hernández, vecino, detalló por la red social Facebook que son más de ocho meses que han tenido que convivir con los olores putrefactos de las aguas residuales que han anegado varias calles.
Puntualizó que Hidrofalcón ha omitido las solicitudes que han hecho los residentes de la urbanización, quienes además de las cloacas desbordadas, han padecido con familiares enfermos con dengue y enfermedades respiratorias, sobre todo niños, adultos mayores y mujeres embarazadas.
Hernández reconoce que la prioridad actual es atender la propagación del COVID-19, pero insistió que las aguas servidas son un elemento de contaminación ambiental que debe ser resuelto a la brevedad, porque también atentan contra la salud de familias enteras.
Por su parte, Norkys Acosta, vecina del sector, reiteró que las denuncias que han llevado hasta las instituciones públicas encargadas de atender el caso de las cloacas desbordadas han sido desatendidas, porque todas trabajan en la actualidad en los planes de contingencia para prevenir la propagación del COVID-19.
Dijo que el mismo reclamo ha sido elevado ante los integrantes del consejo comunal del sector, quienes solo han respondido que no hay solución a corto plazo, debido a que existe una obstrucción en las tuberías de la urbanización Santa María y por la cuarentena, Hidrofalcón no tiene la capacidad operativa de solventar el problema.
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