El Hospital Central Antonio María Pineda es el centro de salud más importante del estado Lara | Foto: Liz Gascón (Archivo)
Barquisimeto.- En el Hospital Central Antonio María Pineda y el Hospital Pastor Oropeza de Barquisimeto –principales centros asistenciales del estado Lara– persiste el déficit de guantes, tapabocas y materiales descartables, reportaron fuentes consultadas por El Pitazo, este viernes 27 de marzo. Aunque no forman parte de los centros centinelas para atender casos positivos de COVID-19, tienen alta rotación de pacientes.
Según el Colegio de Médicos y el Colegio de Enfermería del estado Lara hay fallas en la dotación de equipos de bioseguridad para el personal. La vicepresidenta del Colegio de Enfermería, Norkis Durán, señaló que la entrega de guantes y tapabocas es limitada en el Hospital Central Antonio María Pineda.
“El personal lleva sus tapabocas y gorras de tela. La dotación de materiales descartables es restringida y solo les dan un tapabocas para jornadas de veinticuatro horas aunque la vida útil de estos implementos es de cuatro a seis horas” explicó.
Un médico residente del centro asistencial, que reservó su identidad, declaró a El Pitazo que tienen implementos de protección gracias a donativos enviados a la institución en las últimas dos semanas.
“En reiteradas oportunidades se le ha solicitado al director del hospital central que garantice la dotación de guantes y tapabocas. Hemos trabajado con donativos de independientes y empresas privadas que permiten solventar en la última semana”, denunció.
En el Hospital Pastor Oropeza hay racionamiento de agua y también escasean los implementos de limpieza, advirtió el presidente del Sindicato de Trabajadores del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales en el estado Lara, Alberto Domínguez. “El suministro de insumos no ha llegado a cabalidad. Solo equipan bien en caso de estrictas emergencias”, sostuvo.
Domínguez señaló que el transporte del personal presta un servicio irregular y los trabajadores están obligados a caminar hasta el Hospital Pastor Oropeza. La escasez de gasolina imposibilita el traslado en vehículos particulares.
Los trabajadores del sector salud pueden tardar hasta nueve horas en colas de gasolina sin la garantía de equipar sus tanques.
“Los funcionarios de los cuerpos de seguridad tienen el monopolio de la gasolina irrespetando el salvoconducto para médicos y enfermeras. La Dirección de Salud tiene un transporte, pero no es la solución”, indicó el médico residente del hospital central.
El Colegio de Médicos del estado Lara designó una comisión para asegurar el suministro de combustible al personal de guardia en los centros de salud pública mediante la entrega de tickets en el Círculo Militar de Barquisimeto.
“Cada director de centro nos da la información de los médicos que están de preguardia y se hacen las gestiones. Tratamos de dirigir para que tengan combustible los médicos y las enfermeras y no se repita la situación de días anteriores que quedaron muchos por fuera”, explicó la representante del Colegio de Médicos, Deyanira Gentile.
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