Maracaibo.- Por cuarta vez en los últimos ocho días, María García intentó este jueves 12 de marzo abastecer su carro de gasolina en una estación de servicio en el norte de Maracaibo. No lo logró. Al igual que las veces anteriores, luego de pasar aproximadamente cinco horas en cola, el combustible se agotó.
Desde hace más de un año, en la capital zuliana se hacen colas de vehículos para comprar gasolina. La espera para poder surtir se incrementan cuando Petróleos de Venezuela (Pdvsa) disminuye los despachos de combustible, como ocurre desde el pasado jueves 5 de marzo.
Fuentes de la estatal informaron a El Pitazo que la distribución de combustible se redujo a la mitad desde el sábado pasado para controlar los inventarios que hay en el llenadero de Bajo Grande. «Hoy (jueves) apenas salieron 60 camiones cisternas de los 120 que salían a diario la semana pasada», contó un trabajador.
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La disminución en la distribución de combustible se percibe en la capital zuliana donde decenas de estaciones de servicio estaban cerradas este 12 de marzo. Algunas quedaron vacías después de las 2:00 pm, como es el caso de El Portal, donde María García no pudo llenar el tanque de su vehículo en su cuarto intento desde el jueves pasado.
Tras hacer en vano su tercera cola en una bomba, García optó el domingo por dejar su carro en el estacionamiento de su casa y moverse en transporte público, pero la dificultades para conseguir efectivo le hicieron reconsiderar la medida. «Vine hoy de nuevo porque es difícil conseguir efectivo. En los bancos solo te dan 50 mil bolívares y eso me alcanza para un día».
La maestra de 58 años llegó a las 8:00 am a la estación de servicio El Portal, que solo surte a los funcionarios públicos, medida que no se cumple a cabalidad porque quienes pagan cinco dólares echan gasolina sin hacer cola y sin importar si no posee un carnet de empleado público.
Pdvsa despachó a la estación de servicio 24.000 litros de gasolina, con lo que se podrían surtir 480 carros, tomando en cuenta que la Gobernación de Zulia ordenó en diciembre pasado el surtido máximo de 50 litros por vehículos. Pero el funcionario militar -a cargo de la bomba- solo marcó 252 unidades y al final entraron 225 vehículos.
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«Ellos dijeron que iban a marcar 300 y en esa cuenta yo era la 276. Hice la cola porque me correspondía echar, pero con la maraña que tienen echan más los que pagan que los que hacemos la cola», denunció García, quien a las 2:30 de la tarde se fue molesta de la estación de servicio. «Aquí no hay nadie que ponga freno a esto», recalcó.
García debe esperar hasta el sábado para poder hacer de nuevo la cola en una estación de servicio, ya que en el Zulia se aplica desde el 22 de diciembre el esquema de pico y placa para la venta de gasolina. Según ese esquema, los carros con matrículas que terminen en números impares -como la de García- sólo pueden ser surtidos de combustible los martes, jueves y sábado, y el domingo para todos los números.
A 20.000 el litro
Ante la escasez de la gasolina, el precio del combustibles aumentó en el mercado ilegal. En 100.000 bolívares en efectivo venden la pimpina de cinco litros de gasolina, es decir a 20.000 bolívares el litro. Llenar el tanque de un vehículo que almacene 40 litros sale en 400.000 mil bolívares en efectivo.
