Coro.- Durante los largos y consecutivos apagones registrados en la región falconiana, la Unidad de Anatomía Patológica del Hospital Universitario de Coro funciona con normalidad. Los cortes eléctricos no han incidido en la operatividad de sus instalaciones que cuenta con una cava operativa de ocho compartimientos.
Así lo refirió la doctora, quien manifestó que los ingresos de fallecidos han sido bajos por lo que la situación se ha mantenido controlada, no sólo con el resguardo y la entrega de cuerpos, sino también con los servicios de laboratorio como biopsias requeridas por el Hospital de Coro y citologías que provienen de pacientes de toda la red de salud pública de la región.
La doctora Dilbeth Álvarez, quien también labora en la morgue del hospital, refirió que tras la explosión de la refinería Amuay en el año 2012 se evidenció la necesidad de mejorar el servicio de medicina forense en la región por lo que se llevó a cabo un proceso de reestructuración y remodelación en la institución.
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Este proceso trajo consigo la instalación de una cava importada, adquirida tras el convenio China-Venezuela con una capacidad para resguardar 16 cuerpos. Sin embargo, desde el año pasado esta cava presentó fallas por lo que han dejado de usarla para evitar que se dañe de forma irreversible.
La cava, explicó Álvarez, es importada, así como los repuestos necesarios para ponerla en marcha nuevamente. Afirmó que se han hecho las diligencias necesarias y que incluso desde la dirección del hospital autorizaron a los trabajadores del servicio forense a hacer la búsqueda de tales repuestos por cuenta propia, pero no han dado con ellos.
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