Barquisimeto.- En la Plaza La Moneda de Barquisimeto, ubicada en pleno centro de la ciudad y mejor conocida como la plaza de los libreros, agosto inició con pocas ventas y cambalaches. Los textos escolares son los más solicitados en esta temporada, pero no tienen la misma salida de años anteriores.
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Un libro de educación primaria o inicial cuesta hasta Bs. 120.000. Las listas de útiles suelen incluir tres textos y los representantes necesitan el equivalente a nueve salarios mínimos integrales para adquirirlos.
Carlos Álvarez, uno de los 24 libreros del lugar, contó que los diccionarios y guías de educación primaria tienen los precios más elevados. “El valor puede variar, algunos están en noventa mil o cien mil bolívares y también está la guía Caracol que es muy usada en ciento cincuenta mil”, explicó.
La variedad en la Plaza La Moneda, agregó, es más amplia que en las librerías tradicionales.Desiré Quiróz tiene un hijo en preescolar y ha recorrido varias ventas de libros para comprar un libro de lectura. Los más económicos que ha conseguido están por el orden de los Bs. 30.000 y Bs. 40.000. “No están caros, pero tenemos que comprar los útiles en partes o sería difícil de costear”, comentó.
Los cambalaches que popularizaron la pintoresca plaza de 24 libreros todavía se realizan, aunque con menos frecuencia. Pastor Aguilar tiene 25 años en el lugar y es uno de los vendedores más antiguos. Recuerda que antes de acentuarse la escasez de bolívares en efectivo compraban libros usados y ahora solo aceptan cambalaches. Antes hacían decenas, hoy día son distanciados y no exceden de uno o dos por jornada.
“Dependiendo del libro y la condición en la que se encuentre recibimos dos libros y entregamos uno”, detalló.
Maurizio Odierno llevó una bolsa de libros de bachillerato y clásicos literarios con la intención de cambiarlos por libros de ciencia ficción. “Es la mejor alternativa para renovar la biblioteca y darle el mejor uso a los libros”.Los libreros aceptan enciclopedias y textos escolares usados. “Las personas pueden traer enciclopedias para trueques”, recalcó Álvarez.
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